Opinión

La trampa nipona

Varios jugadores japoneses celebran la victoria. EFE
photo_camera Varios jugadores japoneses celebran la victoria. EFE

En octavos contra Marruecos y, en caso de victoria, probablemente contra Portugal en cuartos. La derrota ante Japón cambia el camino que parecía marcado para España en el Mundial. Antes del choque de este jueves era casi seguro verse las caras con Croacia primero y Brasil después, pero ahora los duelos ganan proximidad. 

La favorita para ganar el Mundial, según aseguró el Tata Martino el otro día, cayó en la trampa como lo había hecho Alemania en la jornada inaugural del grupo. En ambos partidos, Japón firmó una primera parte ridícula. Encajó un gol que pudieron ser más y saltó al campo en la segunda con cara de cordero degollado. Pero no.

Alemanes y españoles recibieron dos goles en un visto y no visto y después se estrellaron ante un muro. A los de Luis Enrique les salvó que llevaban casco, el que se ganaron con la paliza ante Costa Rica.

Llega ahora el momento de las lecturas: "Esto viene bien para bajar un poco de la nube", "mejor perder ahora que en octavos", "ni antes éramos tan buenos ni ahora tan malos"... frases hechas que no valen para nada, como la segunda parte que la selección jugó ante Japón. El Mundial sigue para España, pero ahora con la cabeza un poco más baja. Igual hasta no es malo. O sí.

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