Opinión

Piornedo

SI OS ANCARES ofrecen tanto (bueno) al visitante, por su historia, su cultura, su paisaje..., un oasis de la naturaleza no siempre valorado en su justa medida, no hay duda de que Piornedo es su esencia y su alma, por su tipismo, por su encanto y sobre todo por sus pallozas prerromanas, cuyo futuro se ve amenazado por el deterioro de las techumbres vegetales, con la cada vez más escasa paja de centeno, por lo que la reposición es muy complicada y, sobre todo, costosísima. Y son diecisiete. Tanto es así que algunos propietarios ancareses, al no poder afrontar la inversión, optan por la chapa metálica para recubrirlas, un atentado a la estética y al patrimonio de tan singulares y legendarias construcciones. La Xunta, ya se publicó en este periódico, retiró en 2010 las subvenciones que venía prestando para el mantenimiento, y sin la ayuda de la Administración hay pocas posibilidades de que la rehabilitación sea efectiva, tanto más si es necesario disponer de especialistas que ejecuten el techado, aunque esta dificultad podría asumirse contando con que una decena de personas acaba de realizar un curso de especialización. Es muy de lamentar que Patrimonio no adopte un conjunto de medidas serias, tendentes al sostenimiento de tan apreciado acervo histórico.

Comentarios