Opinión

Móviles/pistola

INSUMISOS e inobedientes, por lo que sea, los hubo siempre. Aún recordamos los insubordinados de la mili como rebeldes más llamativos. Surgen ahora los que se autodenominan insurrectos de teléfonos móviles: renuncian a los artilugios inteligentes, smartphones, y por consiguiente a los whatsapp, cámara de fotos, internet y todo lo que abarca redes sociales y consiguientes aplicaciones. Solo sirven para llamar, volviendo a los orígenes más primitivos. Calculan que afecta ya al cinco por ciento del mercado móvil de jóvenes de entre 18 y 25 años, con dispositivos que cuestan poco más de diez euros. Claro que se intuye difícil el éxito y la pretensión de frenar los avances y las nuevas tecnologías del sector. De no ser así, en Estados Unidos no se comercializaría, dentro de dos o tres meses, un nuevo móvil con pistola incorporada. Leyeron bien. No exento de polémicas, en principio está pensado para la defensa personal, pero vaya usted a saber, puesto que dispondrá de dos cañones para proyectiles, además de un puntero láser con el que repeler ataques o propiciarlos, que de todo habrá entre quienes los manejen.

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