Opinión

Leoneradel caos

TODOS los ingredientes del caos y del desorden se dan la mano para que el menú, el que se ofrece al administrado en la desconcertante francachela de la función pública, se indigeste. Todo se atasca, todo lo que debiera aunar fluidez para que el ciudadano/contribuyente goce o disponga de una atención rápida y eficaz en su gestión burocrática/administrativa, a la que tiene derecho, está encasquillado por la disfuncionalidad y la anarquía. No está muy claro si es debido a la improvisación, ineptitud o pasotismo de quienes tienen la encomienda de resolver los problemas planteados por la situación epidémica, que para eso cobran, en el caso de las diferentes administraciones públicas, pero que afecta muy directamente a la leonera del Concello de Lugo, con el registro taponado y el servicio telefónico del 010 que no responde a las llamadas ni da abasto para las citas previas. En vez de dar fluidez, todo se embotella. Si se considera imprescindible un control para esquivar hervideros, en aras de prevenir potenciales contagios, lo menos que se puede exigir es planificarlo y sistematizarlo, aportando medios, sobre todo humanos, para que la regulación no se interponga al sistema. Nunca puede ser peor el remedio que la enfermedad.Lo es.

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