Opinión

Otro cuento de Navidad

EN 1843 Charles Dickens publicaba su famoso “Cuento de Navidad”, tras visitar una escuela para niños pobres en Londres, movido por un demoledor informe sobre las condiciones del trabajo infantil, cuyas conclusiones conmocionaron a la opinión pública de la época. Hoy en día Dickens además de la pobreza tendría que denunciar otros males que afectan al mundo como el hambre, el calentamiento global, la violencia, o la desigualdad.

Estas cuestiones integran casi literalmente la Agenda Global que anualmente elabora el World Economic Forum con los “Top 10 Trends”, o asuntos sociales, económicos y políticos que más preocupan al mundo.

La lista se inicia con la “Desigualdad”, en un mundo en que la diferencia de ingresos ya no es un problema entre ricos y pobres, sino que afecta directamente a la clase media, con una brecha que se agranda en Asia y América, persiste en Europa y amenaza el crecimiento en África. 

Una segunda cuestión es el “Desempleo” que se deja sentir especialmente entre los más jóvenes, en una tendencia que requiere para subsanarse potenciar los aspectos del conocimiento que no pueden automatizarse, como el liderazgo, la colaboración o la creación.

Dos cuestiones más que van un poco de la mano son la “Falta de Liderazgo” y el “Debilitamiento de la Democracia”. En ambos casos el origen del problema está en la pérdida de credibilidad de las instituciones, públicas y privadas, y la desconexión entre los ciudadanos y sus representantes, lo que amenaza la supervivencia de las instituciones y explica el populismo, expresión de una decepción colectiva por el funcionamiento de un sistema que discute mucho y soluciona poco.

La “Geoestrategia” es también otra preocupación. La caída del telón de acero y la integración de Rusia y China en el sistema económico global no ha sido suficiente para mejorar la seguridad del mundo, además han surgido nuevas amenazas como Corea de norte o el integrismo islámico.  

También preocupa la “Contaminación” y el aumento de la “Frecuencia de las Catástrofes Naturales”, ambos relacionados con el cambio climático, y cuya solución pasa más por la prevención que por la reacción.

Otro de los problemas detectados es el incremento de los “Nacionalismos”, lo que parece contradictorio en un mundo cada vez más global, aunque tal vez esta sea la respuesta sociológica al fenómeno.  

En noveno lugar estaría el “Acceso al Agua”, cada vez más difícil por la combinación de problemas, como el rápido crecimiento de la población, las restricciones en el suministro y la pobreza en países subdesarrollados.

El último de los temas es la “Relación entre Salud y Economía”. La sanidad es un desafío para todos los países que cada vez emplean más recursos por las exigencias de la ciudadanía a las Administraciones Públicas. 

El análisis de las tendencias finaliza con una preocupación, que acabará siendo incorporada a la Agenda Global: el aumento del rechazo a la inmigración, y sus formas de racismo, xenofobia e intolerancia.

Si no queremos que estos fantasmas de las navidades pasadas y presentes provoquen estragos en el futuro y si queremos afrontar con éxito los desafíos que plantea la Agenda Global necesitaremos mucho liderazgo con menos raíces financieras y más éticas. 

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