Opinión

O Courel

EN MI libro Un ano no Courel —ese año fue 1994— escribí: "Que quede O Courel. Que de tódolos xeitos quedará. E iso é o único que importa". ¡Quién iba a suponer, ni en la peor pesadilla, que esa afirmación y ese deseo iban a resultar tan falsos! Subí a todos los montes, visité todas las aldeas, descansé en los soutos, me sumergí en las devesas, hablé con las gentes, admiré las águilas reales de la Escrita. En realidad ese año de exploración sistemática de la sierra fue el colofón a lustros y lustros de excursiones por O Courel. Y ahora, aldeas quemadas —Vilar era mi preferida—, gentes hundidas y desesperadas, montes negros, unos 250.000 animales calcinados. ¡Qué pena, qué amargura! Courel dos tesos cumes.

Comentarios