PACHÁ FUE y es una discoteca mítica que fraguó su leyenda en Ibiza y en Madrid. Las cerezas de Pachá se convirtieron en una marca de la noche española que perdura todavía. Marca solo comparable al toro de Osborne o al cartel de Tío Pepe. Dadas las relaciones difíciles del PP y Cs en la Comunidad de Madrid, circula por ahí un rumor sobre cómo apodan al líder de Cs, Ignacio Aguado, en el entorno de Cifuentes. Le llaman Míster Pachá, porque al parecer Aguado tuvo ese supuesto honor en su momento, antes de dejar de ser soltero de oro por su licenciatura en Icade y los prósperos negocios familiares. A Aguado no le sentó bien que Cifuentes le diera plantón en el seguimiento del pacto. Y es verdad que en Andalucía tampoco acude al seguimiento Susana Díaz. Ignacio Aguado busca su espacio y su protagonismo al margen de su exitoso pasado en Pachá, porque teme que Begoña Villacís sea la candidata de Cs a la presidencia de madrileña. Entra más en la lógica de Rivera, siempre rodeado de inteligentes y bellas mujeres.
