SUSANA DÍAZ no se fía de Pedro Sánchez y viceversa. Susana ha sido hábil al adelantar el congreso socialista andaluz para seguir siendo secretaria regional, pero el sanchismo minará su poder presentando candidatos en los congresos provinciales. Las elecciones andaluzas serán en 2019, antes de las municipales, y lo lógico es que Ferraz no se arriesgue con otro candidato a perder la Junta a manos de una alianza PP-Ciudadanos. A Rivera le va bien su sumisión andaluza al PSOE porque la mayoría de sus miembros proceden del socialismo. Y Podemos está cayendo, aunque líderes como Kichi en Cádiz se están afianzando. Cuentan que Susana está muy afectada porque ha dilapidado su imagen de ganadora. Por eso «está hiperactiva», para trasladar el mensaje de que su apuesta es Andalucía. En las catacumbas de Ferraz dicen que Sánchez «nunca olvidará que Susana le traicionó en el famoso Comité Federal de la dimisión».
