DEAR PRESIDENT, dear Pedro (querido Peter): Por expresarlo de la manera más clara posible, la historia de la carta de Ursula von der Leyen encabezada en inglés con "querido presidente, querido Pedro" es la historia de tu Gobierno populista entregado a la propaganda. Y de igual modo, la forma de sacar adelante la ‘contrarreformita’ laboral que convalida la de Fátima Báñez, está en el ADN de un Gobierno precario y maniobrero con tendencia al esperpento, aunque la oposición también tiene lo suyo. Moncloa filtró dicha misiva como gran exclusiva dando a entender que era un apoyo explícito al reparto de los fondos europeos de tu coalición gobernante, hasta ahora realizado sin filtros de control ni transparencia. Las terminales mediáticas del régimen socialcomunista en la mente de todos que has implantado en España, Dear Peter, se entregaron a una vehemente tarea publicitaria para desacreditar las críticas de la oposición, que denuncia falta de independencia en un reparto partidista del dinero europeo que favorecen a las comunidades y ayuntamientos gobernados por los socialistas y tus socios.
El revuelo no fue tan notorio ni positivo como el que provocó Rafa Nadal con sus 21 Grand Slam, pero causó tanta polémica que la propia Comisión Europea presidida por doña Úrsula tuvo que desmentir que se trate de un "varapalo" a la oposición, sino de una respuesta de cortesía a otra carta tuya, dear Pedro, que también se enviará a la totalidad de los veintisiete. Una carta ajena a la polémica española por el reparto de los fondos que tú llevas al terreno de lo patriótico cuando muchos dicen que embarras el campo del obligado juego limpio.
Dear President: te reconozco el resurgir de las cenizas del Comité Federal y la habilidad con la que alcanzaste el poder bajo el inesperado éxito de una moción de censura imposible y seguramente irrepetible. Pero lo que a continuación has implantado en España, previa repetición electoral, es una realidad virtual a tu medida donde la democracia española se distorsiona a diario en favor de la radicalidad y en contra del interés general. Te escribo, querido Peter, que tu mejor defensa es que gobiernes para todos y no para los tuyos, incluidos los que te sostienen en Moncloa. De lo contrario terminarás siendo la segunda parte parodiada de Zapatero, cuando las segundas partes nunca fueron buenas. El estilo y las formas definen la mayoría de las veces el estilo y las formas. Le pasa a Nadal, te sucede a ti, alcanza a cualquiera. Pero lo tuyo va camino de convertirse en el récord insuperable del engaño y la mentira, en el libro Guinness de la picaresca política y la maquinación del truco del almendruco, puro trilerismo de lo público. Ya no te voy a recordar, dear Pedro, que prometiste no pactar con los extremismos porque te quitaba el sueño. Pero lo de Podemos, ERC y Bildu no solo te delata, reforma laboral al margen, sino que legitima cualquier pacto futuro al que pueda llegar el centroderecha. Ese revisionismo intervencionista de tu Gobierno, abriendo viejas heridas curadas por la Transición, desenterrando a Franco con el dóberman o resucitando la memoria selectiva, complica la convivencia y la naturaleza misma de una democracia abierta, participativa y sanamente plural.
Querido Peter: puedes, y así lo hiciste, usar el estado de alarma declarado inconstitucional por el TC para gobernar a base de decreto, pero eludir el control parlamentario y hurtar a la sede de la soberanía popular del debate sobre el estado de la nación te otorga fama caudillista. A veces da la sensación de que te sientes más cómodo cerca del Kremlin y los regímenes bolivarianos que de nuestra monarquía parlamentaria por pleitesía a tus socios comunistas. Acudir a la expo de los Emiratos Árabes y no ver en el cercano Abu Dabi al Rey emérito, aunque sea sin cámaras, da a entender que respaldas el destierro. Hasta Carlos Herrera, que no tiene responsabilidades de Estado, ha tenido ese gesto de cortesía humanitaria que tú niegas a Juan Carlos I.
Dear Pedro: los indultos en contra del criterio de Tribunal Supremo y la excarcelación de presos etarras en contra de la memoria de las víctimas es una provocación a los principios y valores que deben regir el sistema democrático español. Se entiende que haces eso para mantenerte en Moncloa, pero en política es mejor la coherencia que la ofensa, la verdad que el fraude, la decencia que la frivolidad. Roza la falsedad vestir de derogación la convalidación de la reforma laboral del PP impuesta por Bruselas para darnos los fondos Next Generation y para seguir creando empleo. Pero sacarla con Ciudadanos y otros grupos minoritarios porque tus socios se niegan a dar cobertura a la farsa es una muestra más de la engañifa general en la que se ha convertido la presente gobernanza. Del supuesto error informático y el presunto comportamiento punible de Batet mejor callar en espera de los tribunales. Dear President, dear Pedro, querido Peter: tu viraje socialdemócrata y espejo portugués carece de credibilidad porque viene a ser verdad eso de que "dime con quién andas y te diré quién eres". O por terminar en refranero: "Belleza sin talento, veleta sin viento".
Tres en uno
ACEITE PARLAMENTARIO para evitar una derrota. El Gobierno forzó esta semana que se votara en el Congreso de forma conjunta la revalorización de las pensiones y el uso de mascarillas en el exterior que ahora va a derogar, también por decreto. Sin duda, otra triquiñuela del poder colando las mascarillas en esa votación para no sufrir un revés en la semana de la reforma laboral. Pero el lubricante también alcanza la clavada de impuestos: pagamos un 25% más por llenar el depósito, y no digamos ya la multiplicación del precio del recibo de la luz en la era Sánchez bajo la mentira de que en diciembre pagaríamos lo mismo que en 2018. Pero por si no fuera poco, el Gobierno ha aprobado con tres en uno la ley de Vivienda en contra del informe del Poder Judicial y con la intención de tramitarla por vía de urgencia. Una ley intervencionista que atenta contra la propiedad privada y cuya responsabilidad, como la cogobernanza covid, recaerá en las autonomías. Ione Belarra convirtió en demagogia la rueda de prensa del Consejo de Ministros, pues apenas incidirá en los alquileres.
Control de campaña
EN AUSENCIA de Sánchez, el Gobierno convirtió la sesión de control del pasado miércoles en el Congreso en un escaparate para hacer campaña electoral sobre Castilla y León. Varios diputados socialistas, incluido el superministro Bolaños, atacaron al PP y sus políticas en Castilla y León, haciendo uso electoralista del hemiciclo. Bolaños llevó también a ese terreno las críticas de la oposición al reparto de los fondos europeos. Otra muestra más de presidencialismo impositivo y electoralista en plena campaña electoral castellanoleonesa. Por cierto, Sánchez se enfrenta a otra sanción de la JEC por vulnerar el principio de neutralidad, dice el PP, al convertir un acto del Ayuntamiento de Alcalá de Henares en un «mitin político sufragado con dinero público». Recordemos que Sánchez se convirtió en 2019 en el primer presidente de la democracia española sancionado por la JEC por conceder una entrevista en Moncloa en plena campaña electoral. Entonces pagó 2.420 euros a los populares tras recurrir al Tribunal Supremo una multa de 500 euros.
