Opinión

Tormenta perfecta

DE UN tiempo a esta parte deberíamos incluir en este periódico una sección de Catástrofes Cotidianas. En ella aparecerían esa serie de titulares del estilo «Cierra el bar....» o «Siguen sin abrir...», que nos golpean a diario en estos tiempos de coronavirus. Es un constante goteo que oscurece el horizonte. Los nubarrones se extienden por doquier, pero en A Mariña se produjo la tormenta perfecta. La comarca, que vive los meses más negros de su historia reciente con el anuncio del cierre de la planta de Aluminio, sufre también un brote del Covid-19 en este año tenebroso.

La Xunta trató de capear el temporal. El Gobierno gallego no tenía ningún interés en declarar el confinamiento y restringir la movilidad en la Costa. Ni quería ponerla en el foco de los informativos nacionales en pleno verano, ni le convenía tomar esa decisión antes de las elecciones. 
De hecho, los cinco días de restricciones suenan más a un cálculo político, para facilitar el acceso a las urnas el 12-J, que sanitario, ya que la escalada de las cifras de contagio puede crecer hasta el pico en las próximas jornadas. A Feijóo no le quedaba otra opción que el cierre ante la evidencia de que corremos un riesgo sanitario, aunque la coyuntura no sea tan grave como en marzo, cuando desconocíamos lo que se avecinaba. Afrontamos, además, un riesgo económico, al prolongarse el parón comercial y hostelero. Todos nos preguntamos quién pagará la factura de esta doble debacle —industrial y turística— en A Mariña. ¿Caeremos en el olvido tras la lluvia de promesas?

Tras tres meses de encierro, queríamos respirar y nos convencimos de que la pandemia estaba en vías de solución. Pero cuando despertamos, como en el microcuento del dinosaurio de  Monterroso, el bicho seguía ahí, agazapado para saltar de persona en persona. Si desde la crisis de 2008 recibimos cada año con un conformista «que me quede como estoy», el optimismo parece ahora una cosa de ingenuos. Aún así hay que pelear para que ni el Covid, ni Alcoa, nos roben la esperanza y el sol vuela a salir tras esta galerna de verano.

Comentarios