EL ALCALDE de Foz expresa su sorpresa y malestar por los 250 casos de exceso de velocidad en casco urbano que la Policía Local detectó entre el pasado sábado y domingo y sobre los que cursó las oportunas denuncias. Foz, con unos diez mil habitantes, triplica su población en los meses de vacaciones veraniegas. Es un argumento para la prudencia al volante y para el respeto a las señales de tráfico para facilitar la convivencia ciudadana. La alarma del alcalde está justificada. Si la noticia de estas 250 multas por exceso de velocidad sirve como llamada a la prudencia de los conductores habrá cumplido.
Adiós al plástico
La desaparición de la bolsa de plástico gratis en lo supermercados no crea ningún rechazo en los consumidores. La opinión pública incluso lo valora como un paso positivo en la necesaria defensa del medio ambiente. La desaparición de esas bolsas de plásticos es una importante acción frente a la contaminación. Están en el mar, en los ríos y en el paisaje urbano o rural como muestra de carencias de civismo. ¿Qué explica que las bolsas de papel sin rotulación alguna sean algo extraordinario en el comercio de alimentación entre nosotros? La pregunta surge cuando no hace muchas décadas que esas bolsas de papel formaban parte de los usos en los viejos ultramarinos o colmados para la venta de productos de alimentación a granel en Galicia y en España. Eran hábitos más ecológicos y respetuosos con el medio ambiente, como la devolución de envases de cristal. Una forma esta de reciclar y nos dirán los economistas, sin añadir carga ideológica, si también significaría hoy un freno a una práctica de ciclos de destrucción de bienes y despilfarro de recursos de todos, como parecen los universales envases desechables.
