Opinión

Forestal: atreverse

LA TEMÁTICA forestal dominó en las preguntas del diálogo con la conselleira de Medio Rural ayer en Vilalba. Ordenar las plantaciones y aplicar racionalidad es una urgencia que debería implicar al sector, a la sociedad y a las diferentes fuerzas políticas. La polémica sobre ordenación en las plantaciones de eucaliptos es una parte sintomática del problema: la resistencia al ordenamiento y a la racionalización. No se trata de prohibir la presencia del eucalipto en Galicia. Se trata de aplicar orden a las plantaciones y asegurar por esa vía la sostenibilidad de las mismas como recurso económico. Es necesaria valentía y responsabilidad política para asumir este reto. La conselleira Ángeles Vázquez se declara dispuesta a hacerlo desde el diálogo y el consenso. Debería encontrar la titular de Medio Rural, antes de nada, apoyo dentro de su propio partido y en los de la oposición. Estamos ante una responsabilidad de país. Sería perjudicial, incluso para los intereses económicos de los productores de eucalipto, no afrontar el ordenamiento del sector. Y sería lamentable que se impusiesen los temores partidistas por el malestar que pueda generar en algunos la asunción, al fin, de la responsabilidad de afrontar el ordenamiento en los montes y el rural gallego. Lo exige el sector forestal como fuente económica en sí -el mercado como se acaba de experimentar con esta depresión no se autorregula, ni en el eucalipto-. El problema de los incendios forestales es, antes de cualquier otra medida y de incrementos presupuestarios y de personal, de ordenación en las plantaciones. Y, finalmente, un planteamiento a presente y futuro para asentar población en el rural gallego obliga a entender el respeto y el cuidado del paisaje como recurso económico. No habrá futuro para el turismo rural si se ignora el cuidado del paisaje. Más que las limitaciones extremas a construir en el rural, deberían estar el buen gusto y la calidad.

Comentarios