Los problemas del agua en Vigo, con el reparto de los tradicionales mandobles demagógicos del alcalde Abel Caballero para la Xunta, el PP y el BNG, y para quien no le aplauda o no se calle, coinciden con el gasto extraordinario, y ahí queda eso, en alumbrado navideño para envidia de Nueva York. Debería ser también una alerta, naranja al menos, sobre la gestión del dinero público. No todo puede ser brillo personal e inmediato. No debería. La actuación sobre fugas en las traídas, antes de que aparezcan en la calle, podría ser un destino de la recaudación por agua. Pero quizás sea más rentable en votos dejar boquiabiertos a niños y mayores con las luces. Todo vuelve a la normalidad, o eso parece, y este domingo llega una ciclogénesis explosiva, antes conocida como temporal, algo propio del otoño y el invierno.
Carlomagno para Macron
Por su contribución a la idea y a la unión de Europa el presidente Emmanuel Macron ha sido galardonado con el premio Carlomagno 2018, que recibirá en la ciudad balneario de Aquisgrán. En el número de diciembre de Letras Libres, Emmanuel Carrère publica un extenso retrato del presidente, fruto de "mi semana con Macron". Interesante, entretenido y brillante como todo lo que escribe Carrère. Macron es un seductor a tiempo completo, un intelectual o un hombre culto, algo ya no habitual en la política francesa y europea. Quizás el último en Europa fue Mitterrand. Queda, leído el reportaje, la duda de qué es el macronismo —izquierda y derecha "al mismo tiempo", como ya le bautiza la prensa francesa—, puro personalismo, pero en todo caso un milagro político que, quizás, por la crisis de los partidos tradicionales, debería concluir en positivo. Servir para algo. Lo contrario "será peor que no haber hecho nada". Para él y para Europa. El largo reportaje de Carrère en Letras Libres es una entretenida forma de acercarse a este personaje.
