Opinión

Marianización

EL SIEMPRE sagaz columnista Luis Ventoso, una de las plumas gallegas más incisivas del periodismo madrileño, está convencido de que Pedro Sánchez se encuentra inmerso en un proceso de 'marianización'. Quiere ello decir que sufre una metamorfosis casi kafkiana y que va amoldando su discurso a las circunstancias, arte en la que su predecesor en la Moncloa, Mariano Rajoy, era un maestro. En este nuevo periodo preelectoral, Pablo Casado y Albert Rivera agitan con más fuerza que nunca la bandera del artículo 155. Y el presidente en funciones, consciente de que por ese flanco pueden írsele votos, no duda en mudar sus planteamientos sobre Cataluña y decir que "primero la ley y después el diálogo". Que es lo que defendía el PP cuando estaba en el Gobierno. Pero a Sánchez no le importa, porque sabe que para sobrevivir en política no hay que ser fuerte como un roble, sino flexible como un junco.


El centro vuelve a ser la clave 

Detrás de estos movimientos de Sánchez, crítico con los secesionistas y con Ciudadanos, está la batalla por el centro, que siempre ha sido clave para gobernar este país. Casado tampoco lo ignora y lleva ya un tiempo moderando su discurso.