Opinión

Curar a golpe de sonrisas


Un cirujano egipcio se ha convertido en toda una sensación en TikTok por sus bailes y bromas antes de operar a los niños. El doctor Hesham Abdelkader intenta que los menores entren relajados a quirófano y no piensen en la operación a la que van a ser sometidos. Puede parecer una anécdota, pero cuando el miedo te paraliza hasta las pestañas, una simple sonrisa se convierte en tu tabla de salvación. Lo digo con conocimiento de causa, ya que no hace falta irse a Egipto para encontrar sanitarios que, además de salvar vidas, son capaces de convertir la desesperación en tranquilidad.

Cuando vi el vídeo del doctor Abdelkader recordé a todo el personal que atendió a mi hija en el hospital coruñés Teresa Herrera. Resulta complicarlo explicarle a una niña de seis años en qué va a consistir una intervención quirúrgica sin que se ponga nerviosa, pero al entrar en ese centro hospitalario, uno ya se da cuenta de que reina la calma. Ayudaron mucho las paredes llenas de dibujos y las televisiones con vídeos infantiles, pero cuando la cirujana que la iba a operar comenzó a cantar con ella sus canciones favoritas, el miedo se esfumó por completo.

Salí de aquel hospital con la esperanza de haber completado mi cupo de sustos, pero un año después aterrizamos en la Uci de pediatría del Hula, un lugar en el que el miedo se transforma en pánico. Y una vez más, el personal sanitario se convirtió en mi refugio. Una enfermera —ojalá recordase su nombre para darle de nuevo las gracias— se pasó toda la noche a mi lado explicándome todos y cada uno de los movimientos y pitidos de una máquina que controlaba el corazón de mi hija, pero a la vez aceleraba el mío. El aliento de aquella profesional me devolvió el sosiego. Toda esta gente de la que hablo no sale en los vídeos de TikTok, pero pueden estar seguros de que, con cada sonrisa que le dedican a un paciente, ganan un seguidor de por vida