NO PRESTÉ ninguna atención al tema de la hebilla del cinturón con forma de granada hasta que ayer vi la imagen de Rayos X en el periódico. Visto lo visto, que era una granada tal cual, es bastante impresionante que tardasen media hora en avisar de que había ¡¡una granada!! en un tren. Pero ya se sabe: era la hora del café, bien podría ser un aguacate con una espita para abrirlo con facilidad y tampoco era tan grande como para hacer descarrilar un tren de alta velocidad; o tal vez sí, pero tampoco era seguro. Que estamos de un exquisito...
Vi la imagen de Rayos X poco después de leer al presidente del club de tiro al que estaba apuntado el que tenía intención de cargarse a Pedro Sánchez. Otro fenómeno. Su explicación debió de dejar al presidente mucho más tranquilo. El hombre dice que no era un francotirador, que sería un tirador de cuarta categoría. Es decir: no entiende a qué viene tanto alboroto cuando es prácticamente seguro que va a fallar el tiro. Tal vez le daba un 20% de opciones de acertarle en la cabeza, un porcentaje que le permitirá dormir a pierna suelta. Qué poco preocupan los muertos cuando se viaja en otro tren o no es tu cabeza la que está en el punto de mira.
