Opinión

Luna

P or su tamaño y ubicación, esta columnita es propicia a recoger alguna curiosidad, como si fuera la hojita de un calendario de mesa. Entonces, nada mejor para hoy que explicar algo que mucha gente ignora, por qué la Semana Santa, dentro de unos límites, cambia de fecha cada año y de qué depende tal variación. Pues resulta que el Domingo de Pascua, Gloria o Resurrección ha de ser el primero tras la primera luna llena de la primavera. Es decir, que una festividad judeo- cristiana se rige, en cierta manera, por algo tan ancestral y cósmico como el calendario lunar. Tampoco es nada excepcional y la cristianización de ritos o acontecimientos precristianos se encuentra con bastante frecuencia y está bien estudiada.

Comentarios