Opinión

Un monopatín para volar sin miedo

TODOS LOS muertos son iguales. Y todos los atentados injustos. Pero la cercanía y poner cara a las víctimas nos hace más conscientes del peligro. De la aleatoriedad del terrorismo. Ignacio Echeverría fue un héroe. Muy pocos correríamos a ayudar. Escaparíamos lejos. Pero cualquiera podríamos ser él en una ciudad en la que todos conocemos a alguien. A la que ya viajamos o queremos ir. Es lo que más asusta. Que puedo ser yo, o tú. No había oído hablar de él hasta el atentado, aunque vivió en As Pontes y mi madre, casualidad, fue una de sus profes en la guarde. ¡Y nos enseñó tanto! Nos dejó un símbolo, un monopatín para volar lejos. Sin miedo.

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