ASÍ LLAMABAN a Francisco Álvarez Cascos (Madrid, 1947) en el PP. Acumulaba tanto poder que era más que un secretario general. Era un "general secretario". Tras una larga trayectoria, en la que solo rendía cuentas a José Mª Aznar, se marchó del Partido Popular para fundar su propia formación política, que lleva hasta sus iniciales: FAC (Foro Asturias de Ciudadanos). Con ella llegó a ser presidente del Principado, aunque solo unos meses, y a recuperar el protagonismo perdido en la calle Génova. Un nuevo partido pero con viejos hábitos. Por ello a muchos no extraña que ahora afloren supuestas irregularidades en las cuentas de Foro Asturias, como antes las hubo en el PP. Y con un beneficiario claro: el propio Cascos, que cobró estos años dos millones entre sueldos, dietas y facturas. Según publica Abc, llegó a cargar a su partido desde flores para su hija hasta su licencia de pesca pasando por el arreglo del tododeterreno de la que ya es su tercera exesposa, a quien se alquiló un local que ni siquiera se llegó a usar.
Su partido lo llevará al juzgado
Cascos dice que las acusaciones, que resolverá la Justicia, son maniobras contra él y que ni vive de la política ni espera nada de ella. ¡Solo faltaría!
