La concesión del servicio de recogida de basura de Vilalba expira este martes, tras 20 años de prestación por parte de Urbaser. El acuerdo, en el que se han hecho actualizaciones puntuales, no es prorrogable, por lo que el gobierno local ultima los pliegos del nuevo contrato, que aprovechará para modernizar la prestación "dun servizo básico e fundamental para a cidadanía", tal y como destacó la alcaldesa, Elba Veleiro.
Desde el Concello precisan que los pliegos técnicos ya están listos y solo resta ultimar los administrativos para sacar a concurso el servicio, con la idea de adjudicarlo por al menos cinco años. Hasta que esto ocurra, "o servizo vaise continuar prestando con absoluta normalidade", aseguran.
El importe de la concesión se incrementará sustancialmente, según destacan desde el gobierno local, tanto por los cambios experimentados por la normativa general y específica —es obligatorio, por ejemplo, que al menos el 50% sea reciclaje selectivo— como por la necesidad de actualizarlo. Así, si el coste rondaba los 700.000 euros anuales, en el nuevo contrato superará el millón al año.
El edil Rodrigo Pavón avanza que el gobierno local también prevé revisar el padrón de recogida de basuras. "O goberno anterior fixo modificacións na ordenanza en 2015, pero non revisou o padrón", dice, por lo que existe una gran discrepancia entre lo que se recauda y el volumen que se recoge.
El nuevo contrato, que buscará ajustarse a la realidad de hoy en Vilalba, que poco tiene que ver con el escenario en el que se suscribió el acuerdo precedente hace dos décadas, contempla renovar la maquinaria, ya que mucha está obsoleta; incrementar la frecuencia de la recogida en el rural, donde solo se hace una vez a la semana; o, además de conservar los puestos de trabajo, crear cinco nuevos. Estos derivarían del incremento de horas de recogida al año, que se fija en 17.300 (2.670 jornadas laborales), y de limpieza viaria, que rondará las 14.500 horas (2.236 jornadas).
Una de las grandes novedades será contar con un sistema de gestión informática para hacer un seguimiento de vehículos y maquinaria, optimizar rutas y controlar avisos e incidencias. Los contenedores tendrán sensores que permitirán conocer, por ejemplo, su nivel de llenado. También se prevé mejorar las recogidas de voluminosos, aparatos eléctricos, animales muertos, pilas o la recogida de mercadillos, así como el servicio del punto limpio, incluyendo un servicio móvil.
Con respecto a la limpieza viaria, se fijan zonas y frecuencias y por primera vez se incluye un servicio en las parroquias y en la playa fluvial de A Magdalena.
