Igualdad, competitividad y una lucha por la permanencia en la que, además del Lugo, está involucrada más de media Segunda División. La actual temporada es, junto con la 2013-2014, la que tiene más clubes metidos en la batalla por la salvación a falta de once jornadas para el final. Hasta trece equipos —entre el Lugo, vigésimo con 34 puntos, y el octavo, el Spórting con 41— están separados por poco más de dos partidos de distancia, un embotellamiento que solo se había observado una sola vez en los últimos 20 años.
Junto con la actual situación, donde el Lugo forma parte de un grupo amplísimo de clubes que luchan por la supervivencia, la Segunda División solo había vivido una situación similar hace seis campañas en las últimas dos décadas.
En aquella 2013-2014, el Alcorcón y la Ponferradina contaban, en los puestos decimonoveno y vigésimo respectivamente, con 37 puntos. En seis unidades estaban otros once equipos, entre ellos el Lugo, que contaba aquella temporada con 43 puntos en la jornada número 31 igualado con Mallorca, Numancia y Murcia. Entre el descenso y el octavo de la tabla, que era el conjunto pimentonero, estaban también el Sabadell con 41; Zaragoza, Jaén, Córdoba y Hércules con 39 y el Mirandés y el Real Madrid Castilla con 38.
Las otras campañas con cifras similares a la actual se precisó de 50 puntos para la salvación
Esa temporada acabaron bajando el Mirandés con 50 puntos, el Castilla con 49, el Jaén con 48 y el Hércules con 45. Ese curso se necesitaron 51 unidades para poder librarse del descenso, ya que fue el Alavés el primero de los equipos a salvo con ese guarismo en su casillero.
Otro curso futbolístico donde la igualdad y el alto número de implicados en la pelea por el descenso fue la tónica a lo largo de la competición fue la 2009-2010, en la que hasta nueve equipos estaban en un arco de seis puntos en la tabla. Entre el Salamanca, decimonoveno con 35 puntos y el Nástic, undécimo con 40, estaban el Celta y el Recreativo con 39, el Huesca con 38, el Murcia y la UD Las Palmas con 37, el Rayo con 36 y el Albacete con 35.
En cuanto a la suma de puntos de la zona de descenso en la actual jornada, el Deportivo, que está en la frontera de la salvación, cuenta con 35 puntos. Esa cifra solo se vio superada, en la jornada 31, en dos ocasiones en las últimas dos décadas. La primera en la misma 2013-2014, cuando el Alcorcón y la Ponferradina sumaban, en zona de Segunda B, 37 unidades; y en la 2006-2007, con el Málaga decimonoveno con 36 puntos. Aquella campaña el último en bajar fue el Castilla con 49 puntos, por lo que fue necesario sumar al menos 50 para mantenerse en la categoría.
Por lo tanto, parece que este curso el Lugo tendrá que rondar el medio centenar de puntos para poder seguir siendo de plata la próxima campaña.
Ocón Arráiz pitó un solo partido al Lugo esta campaña, en Almendralejo ante el Extremadura y en el que la actuación del trencilla riojano fue duramente criticado por el club lucense.
En aquel partido el VAR, dirigido por Milla Alvéndiz, dio por válido el tanto del triunfo extremeño cuando el propio Ocón Arráiz lo había anulado previamente por fuera de juego. Además, el trencilla riojano expulsó al lateral Serge Leuko por decir al equipo arbitral: "El tiempo, se está perdiendo mucho tiempo". Además, expulsó al entrenador del Lugo, Curro Torres, y al preparador de porteros, Roberto Fernández, por "realizar observaciones y gestos de desaprobación" a las decisiones del trencilla.
Autobús gratis a Santander
El Lugo fletará un autobús para que los aficionados que deseen acudir al partido ante el Rácing puedan acudir a Santander. Los que quieran viajar por este medio no tendrán que pagar más que la propia entrada al evento, que tendrá un coste de 15 euros. Para que el viaje se organice debe haber un mínimo de 40 personas inscritas.
