Las distintas fuerzas y cuerpos de seguridad tienen previsto intensificar los controles en Lugo para asegurar un cumplimiento más estricto de las restricciones, después de que el conselleiro de Sanidade, Julio Comesaña, apuntara el pasado miércoles que en la ciudad "non todos cumpren" con las medidas. A esa relajación atribuyó el hecho de que, pasados diez días del cierre de la hostelería y más de dos semanas del límite perimetral, sigan sin bajar los casos activos, mientras ya se percibe un aumento de la presión asistencial en el hospital.
El dispositivo de la Policía Autonómica comenzará a partir de este viernes. De lunes a viernes habrá 7 patrullas y 15 efectivos, repartidas en 3 patrullas por la mañana, 3 por la tarde y 1 por la noche. Los fines de semana habrá 5 patrullas y 10 efectivos: 2 patrullas por la mañana, 2 por la tarde y 1 de noche. Los agentes harán controles en la ciudad y alrededores para asegurarse de que se cumple con la limitación de movimientos, se usa la mascarilla, no se reúnen convivientes y no se rompe sin justificación el toque de queda.
Por su parte, la Subdelegación del Gobierno informó de que la Policía Nacional y la Guardia Civil siguen haciendo controles en Lugo y en otros concellos de la provincia desde el primer momento en el que Sanidade aprobó las restricciones. En el caso de Lugo, este jueves mismo, la Guardia Civil hizo controles en la N-VI, a la altura del Balneario.
Desde que se establecieron los cierres perimetrales de Lugo, Monforte, Viveiro y Burela, se celebran reuniones semanales del Centro de Coordinación Operativa (Cecor) en las que se revisa y coordina el plan de trabajo. Precisamente este viernes tendrá lugar uno de esos encuentros. Desde la Subdelegación se aclara que no se ha recibido ninguna indicación por parte de Sanidade sobre la necesidad de centrar los controles en algún aspecto concreto.
Por otra parte, desde el Concello se aclara que la Policía Local intensifica la vigilancia en aquellos ámbitos que son señalados por las autoridades sanitarias como especialmente complejos, como las salidas de los colegios.
En los partes diarios se incluyen las sanciones impuestas por incumplimiento de estas medidas. Entre ellas figuran a menudo las denuncias por ir por la calle sin la mascarilla obligatoria. A veces, ocurre que al identificar gente que se encuentra en esa situación se comprueba también que están reunidos sin ser convivientes.
Aunque podría tratarse de una mera coincidencia, lo cierto es que todo apunta a que esta última semana se ha aumentado la presencia de las distintas fuerzas de seguridad en la ciudad, así como los controles. Además de parar a conductores en las salidas de la ciudad para comprobar que realmente está justificado su viaje, también se puede ver a patrullas comprobando que la presencia de vecinos en la calle pasadas las once de la noche se debe a alguna de las excepciones recogidas por el DOG, como los motivos laborales, sanitarios o de cuidado de personas dependientes.
