La crisis de la falta de temporeros no afectará a los invernaderos chairegos

La campaña arranca en Galicia a mediados de mayo, por lo que Surexport podrá trasladar la
mano de obra desde Huelva.
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La mano de obra escasea en las producciones agrícolas de toda España tras el cierre de fronteras por la crisis del coronavirus pero los gigantescos invernaderos chairegos de Pacios, en Begonte, y O Arneiro, en Cospeito, tienen garantizada la producción, según confirman desde Surexport, e indican que su previsión es recoger este año más de un millón de kilos de frutos rojos.

La temporada de recolección en Galicia arranca a mediados de mayo, cuando la fresa ya terminó de recogerse bajo los plásticos andaluces, y la empresa prevé trasladar a los temporeros al norte, como cada campaña.

"En Huelva tenemos a más de 2.000 personas trabajando y dentro del territorio nacional no hay problemas para que se trasladen los trabajadores", indica José Ángel Roca, el responsable de Surexport en Galicia, que asegura que las cosas serían diferentes si estuviesen en sus países de origen. La mayoría llegan de Rumanía y Marruecos, aunque los hay de otras nacionalidades como Senegal o Bulgaria. Cuando iniciaron la temporada en Huelva tuvieron que prescindir de varios contingentes de trabajadores de Marruecos al cerrarse la frontera.

En la actualidad, hay trabajando en los invernaderos una veintena de temporeros en labores de mantenimiento

"Aquí vamos a poder trabajar igual, no es preocupante", dice el responsable de Surexport, una empresa líder en el sector de la producción de frutos rojos en España que nació en Huelva en 1994 y recaló en Terra Chá en 2013, al tiempo que reconoce que el decreto que ultima el Gobierno para flexibilizar la contratación en el campo de parados e inmigrantes sin autorización de trabajo no les afecta al tener su propio personal.

"La gente de aquí no quiere trabajar en el campo. A ver cuántos vienen", dice un empresario que siempre reitera las dificultades de encontrar mano de obra local para los invernaderos, que ya suman unas 90 hectáreas de cultivos entre Pacios, ahora dedicado en exclusividad al arándano, y O Arneiro, donde se concentran la fresa, la frambuesa y la mora.

En la actualidad, hay trabajando en los invernaderos una veintena de temporeros en labores de mantenimiento, que llegarán a 450 en el pico de producción. En esta temporada, esperan superar las cifras de la anterior y recoger más de un millón de kilos de frutos, de los que 500.000 serán de arándanos.

PROBLEMAS. De la situación actual, el responsable de Surexport critica los problemas del transporte y los costes que supondrán a mayores para la empresa si las cosas no cambian el próximo mes de mayo.

"En el bus solo se pueden cubrir un tercio de las plazas con lo que multiplicaremos a tres cada viaje", critica, mientras incide en que la gran mayoría de temporeros viven juntos en los edificios que habilita la propia empresa. Los inmuebles se reparten principalmente entre Castro de Ribeiras de Lea, donde tienen la planta de embalaje y calidad, y Guitiriz.

"Aquí el problema es la interpretación de las leyes por parte de cada uno", apunta, al tiempo que indica que en el trabajo la distancia de seguridad "está más que garantizada" pero critica la dificultad para conseguir mascarillas.

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