"Chorei como unha madalena cando o tiven nas miñas mans"

El burelés Julio López Quiroga vio cumplido su sueño de publicar un libro, que nace tras la dura experiencia de sufrir una muerte súbita cardíaca
libro
photo_camera Julio López Quiroga, con su libro. EP

Con 48 años recién cumplidos el burelés Julio López Quiroga ha visto cumplido un sueño que perseguía desde niño: escribir un libro. "Chorei coma unha madalena cando o tiven nas mans", recuerda desde A Coruña, ciudad en la que lleva años afincado y desde donde se anima a relatar que el libro es fruto del tiempo que le dejó su temprana jubilación como consecuencia de un episodio de muerte súbita, que lo tuvo debatiéndose entre este mundo y el otro.

Julio se enfrenta a ello con naturalidad y recuerda que el suceso tuvo lugar hace ocho años mientras nadaba con su hija en la piscina coruñesa de San Diego. "Empecei a sentirme mal e pensei que era un corte de dixestión e estiven catro o cinco minutos mareado e pataleando, e logo xa recordo espertar e ter unhas placas enriba", cuenta respecto de las maniobras de reanimación que le practicaron "os meus anxos salvadores" en la propia piscina, que apenas llevaba quince días con desfibrilador. Una suerte que jugó a su favor, como el hecho de que ese día su hija le convenciese para cambiar de planes y dejase aparcado su partido de tenis con un amigo.

La vida seguía, pero diferente, porque le obligó a dejar su "amada" profesión de policía nacional cargada de acción y adrenalina, esa por la que decidió dejar su trabajo en la cofradía burelesa y que se convirtió en su pasión, recibiendo varias distinciones por su trabajo, desarrollado en el País Vasco y en A Coruña. "Eu sigo sentíndome policía, só que non teño placa, que se a tivera...", asevera entre risas, mientras destaca el gran apoyo que supuso su mujer Rosana, la artífice de que se animara a escribir tras el primer año de recuperación, "que foi moi duro, e no que case caín en depresión".

Así, en 2013 empezó a fraguar esa otra pasión que esperaba su momento y que le ha llevado a publicar ‘Y un día desperté’. Un cruce de historias en el que el protagonista, Roberto, despierta tras 35 años en coma y busca  respuestas a lo que llevó a esa situación, "viaxar ao pasado para atopar o seu presente", relata el autor, quien anuncia historias paralelas y flashback al estilo Tarantino, un "desbaraxuste mental" de una historia que empezó a escribir sabiendo cómo acabaría, aunque por el camino —al pasar al ordenador la historia escrita a mano— se fueron sumando personajes con los que no contaba y que le han llevado a poder posar con una obra redonda, "coa que cumprín o meu soño, porque se escribo outros xa serán desexos".

Y seguro que a esta opera prima seguirán otras obras, porque material tiene y aunque una idea ya le ronda desde hace tiempo, Julio, de la burelesa familia de Los Carrochos, confiesa que ahora "só teño na cabeza este libro", del que está en plena promoción y que ya se puede adquirir online en diversas plataformas bajo pedido o en la librería

Atril de Burela, donde tiene pendiente una firma de ejemplares, una de las pocas promociones que permite la pandemia.

Más en A Mariña
Comentarios