Solar vacío y abandonado, nido de ratas asegurado. Es una certeza que tienen los vecinos de todos los barrios de Lugo. Las denuncias por la presencia de roedores son constantes, se repiten por toda la ciudad y de forma reiterada coinciden con la existencia de focos de suciedad y de fincas que sirven de criadero.
Si el viernes algunos lucenses hacían fotos de ratas paseando por calles del centro, hace unos días en la Praza da Liberdade un roedor del tamaño de un conejo obligaba a algunos lucenses a darse la vuelta, entre asustados y asquedados por la imagen.
El problema provoca cada vez más quejas ciudadanas, aunque el Concello dice que no ha tenido este año ningún aviso por roedores en el centro y que en el último trimestre del año se realizó una operación de choque contra los roedores.
Cuatro días sin semáforos en Fonte dos Ranchos
Esas campañas de desratización quizás hayan reducido el número de roedores, pero el problema persiste y se vio recientemente en Fonte dos Ranchos, donde varios semáforos quedaron fuera de servicio durante cuatro días porque las ratas se comieron el cableado.
Tres años con un solar con roedores en la calle Armórica
En la calle Armórica, los vecinos detectaron la presencia de ratas y ratones en sus viviendas y negocios. El fenómeno -que se repite a menudo desde hace tres años- se lo achacan a un bajo que está en estado ruinoso, abierto y sin tejado y que colinda con dos casas de esa calle. Una de ellas es la número 40, una casa con dos pisos y un bajo que alquiló una asesoría, donde dan fe de este problema, que provocó más de una denuncia ante el Concello para que se dirija al dueño del bajo y sanee y cierre la construcción. "Tuve que llamar varias veces al desratizador y pagar una factura en torno a los 50 euros porque cada poco tiempo hay roedores. Eso es muy desagradable y es un problema de sanidad pública que el Ayuntamiento debería controlar, dice una empresaria con negocio en la calle".
De Camiño Real a Milagrosa o Avenida da Coruña
Las quejas por la presencia de ratas se vuelven a repetir en Camiño Real. Desde hace años, los vecinos señalan como foco un terreno abandonado y quieren que el Concello exiga a los propietarios que lo limpien. En A Milagrosa hay también cerca de la residencia de mayores un solar en mal estado, foco de insalubridad, señalado por los vecinos como un nido de ratas. Lo mismo ocurre regularmente en un terreno de la Avenida da Coruña próximo a la gasolinera.
Un foco junto a un colegio en el barrio de A Residencia
En A Residencia tampoco son raras las quejas por la presencia de ratas y la inquietud se desató hace unos meses por un foco próximo a un colegio. En Avenida das Américas, los vecinos llevan varios años quejándose de los roedores que se crían en un solar abandonado y cuyo cierre representa además un peligro por su mal estado, dicen.
El parque Rosalía de Castro, madriguera cerca de los juegos
El parque Rosalía de Castro es otro espacio en el que es habitual ver ratas. Del Parque se las ve salir con frecuencia hacia las calles del entorno y una de las zonas por las que se mueven es la que ocupa los juegos infantiles. Los vecinos creen que las madrigueras están en el propio Parque.
La pelea es mundial y afecta a grandes urbes, como Nueva York, por el fácil acceso a la comida.
