Para aprender a respirar
ESCRIBIR LO QUE ves, lo que no aciertas a ver, lo que no entiendes, lo que te inquieta, lo que te clava al suelo, lo que te echa a volar. Escribir con tiento, sin prisa, con cierto fervor antiguo que nació tal día, en tan buena hora. Escribir como si escribir fuera lo único que sirve, la herramienta primera y última, en este mundo que no conoces, que no conocerás, aunque...