A tiro de piedra de la capital, el municipio de O Corgo cuenta con múltiples posibilidades para el descanso y el contacto con la naturaleza. Ofrece varias alternativas para los senderistas y en todas ellas se combina paisaje e historia. La Vía Künig es una ruta de peregrinación a Santiago pendiente de reconocimiento pero que gana caminantes cada año. El entorno fluvial del Río Chamoso también ofrece muchas posibilidades para disfrutar del verano con tranquilidad.
VÍA KÜNIG. La Vía Künig es una variante medieval del Camino Francés que discurre por varios municipios de Lugo, entre ellos el de O Corgo. Está documentada en una guía para peregrinos escrita por el monje alemán Hermann Künig en el siglo XV y que fue editada hasta en cinco ocasiones.
Este camino medieval, cuyo trazado coincide con la Vía Romana XIX y el Camino Real de Carlos III, se encuentra en proceso de investigación y recuperación.
Entra al municipio de O Corgo procedente de Baralla y después de unos 20 kilómetros enlaza con la capital lucense y con el camino Primitivo. El tramo de O Corgo está debidamente señalizado y supone un paseo especialmente agradable para el caminante.
El Ayuntamiento ha redoblado los esfuerzos en los trabajos de limpieza de este trayecto y en la instalación de miliarios y otro tipo de elementos para apoyar al caminante en su recorrido.
El Pazo de Adai y el área fluvial del río Chamoso son dos de sus recursos turísticos
CHAMOSO. El Ayuntamiento de O Corgo también habilitó una ruta por la playa fluvial y el entorno del río Chamoso. Tiene dos alternativas, una más larga que otra y en ambos casos se trata de trayectos circulares.
La alternativa más larga suma 13 kilómetros que se pueden recorrer en dos horas y 40 minutos. El trayecto corto tiene una distancia de seis kilómetros, que se recorren en una hora y cuarto aproximadamente.
A lo largo de la ruta, y en función de la alternativa elegida, el caminante puede acercarse a lugares emblemáticos como el puente romano de Galiñeiros, la capilla de As Virtudes, sepulcros de piedra, el Pazo de Adai o las iglesias de las parroquias de Adai, Arxemil, Pedrafita o Bergazo.