Top model por un día

El lucense Jesús Alonso fue uno de los seleccionados por Adolfo Domínguez entre más de mil aspirantes para un desfile muy especial
Jesús Alonso. VICTORIA RODRÍGUEZ
photo_camera Jesús Alonso. VICTORIA RODRÍGUEZ

Adolfo Domínguez tiró la casa por la ventana para presentar su última colección, hace un par de semanas. Bajo un título abrumador, El sexo, y mientras el músico sarriano Abraham Cupeiro revivía ritmos ancestrales en su karnyx, desfilaron por la pasarela instalada en la sede ourensana de la empresa, en San Cibrao das Viñas, 45 modelos amateurs seleccionados a través de las redes sociales. Un gesto más para reivindicar la belleza diversa, el nuevo objetivo que se ha fijado la marca gallega. 

Adolfo Domínguez escogió modelos no profesionales para reivindicar la diversidad

Entre los maniquíes –que vieron como su ansiedad de debutantes se multiplicaba al hacerlo en un escenario tan impresionante– estaba el lucense Jesús Alonso, agente de la inmobiliaria Casa Ideal, que llegó hasta ahí por una pirueta de la suerte. Un domingo casero, de sofá y mucho tiempo para navegar por internet, Jesús se encontró la convocatoria de un casting de moda para no profesionales del sector. Sin pensarlo mucho, revisó las fotos de sus redes sociales, escogió las tres que creyó que lo definían mejor y contestó al anuncio. Casi había olvidado esa respuesta impulsiva cuando llegó a su correo un mensaje de la firma de moda. No era un simple "gracias por haber participado en nuestro casting", sino la confirmación de que contaban con él. Era uno de los 45 elegidos entre los más de mil aspirantes que habían concurrido. 

¿Qué fue lo que inclinó la balanza en la selección? Jesús Alonso cuenta que Tiziana Domínguez, hija de Adolfo Domínguez y nueva diseñadora de la marca, "explicó en una entrevista que buscaban gente con una belleza natural, gente normal, alejada de los cánones establecidos y que representase al público que compra su ropa. Hombres y mujeres de todas las edades, tallas y rasgos, pero con carisma, ese que hace que llamen la atención cuando van caminando por la calle. Su deseo es romper los rígidos moldes y estereotipos físicos que han caracterizado los pases de moda". 

En los candidatos se valoró más el carisma que estereotipos físicos como la belleza o la talla

Antes del desfile, Jesús viajó a Ourense, donde se quedó dos días. Tocaban pruebas de vestuario, de peluquería y varios ensayos. Hasta ese momento, él se había hecho la idea de que "iba a ser algo light, pero ya vi que no, que era totalmente profesional y que buscaban crear una auténtica representación artística. Recuerdo que pensé: Esto va muy en serio. El día del ensayo general, ya con la iluminación, la música y la coreografía, nos quedamos impresionados por la magnitud del espectáculo". 

Pese a los nervios que todos sintieron al ver la imponente puesta en escena, trabajar con profesionales se lo hizo muy fácil, como reconoce este agente inmobiliario: "Fue una experiencia espectacular. La gente seleccionada era muy normal, muy sana, y el equipo, realmente agradable, del primero al último, desde las maquilladoras a los encargados de comunicación o la misma Tiziana Domínguez, quien tras el desfile apareció por sorpresa y estuvo con nosotros interesándose por cómo nos habíamos encontrado y haciéndose fotos". 

Abraham Cupeiro ambientó un espectáculo que buscó un juego de luces y sombras

Jesús es realista y en ningún momento se le ha pasado por la cabeza el plantearse dejar su trabajo como agente inmobiliario para dedicarse a la moda, pero la experiencia ha sido tan positiva que no cierra puertas. "Si hay que repetir, se repite", comenta divertido entre risas. 

Por lo de pronto, los responsables de Adolfo Domínguez se sienten tan satisfechos con el resultado que seguramente reincidan en la experiencia, "y yo ya les dejé caer que estaría encantado de que contasen conmigo si surge la ocasión", concluye Jesús.

Comentarios