Reparan los daños que causó la tormenta en el colegio de Oural por 6.000 euros

Varias partes del centro recibieron el impacto de las chapas que salieron volando desde el tejado de un vecino
photo_camera Las chapas que el viento arrancó de un tejado impactaron en el patio del colegio y otras partes del centro. VILA

La tormenta que descargó en varias localidades lucenses el pasado día 4 de mayo causó daños en el colegio de Oural (Sarria) por un valor próximo a los 6.000 euros, de cuya reparación se encarga personal de la Xunta.

Los desperfectos fueron ocasionados por el impacto de las chapas que salieron volando desde el tejado de un vecino y que hicieron un recorrido de más de 300 metros, dejando a su paso una sucesión de destrozos en el patio del centro y otras partes de las instalaciones como el tejado, la puerta de acceso o varios tramos del cierre.

Por fortuna no hubo que lamentar daños personales al estar el colegio cerrado por la pandemia del coronavirus, pero sí desperfectos que fueron tasados en cerca de 6.000 euros. Según confirmó la delegación territorial de la Xunta en Lugo, la Consellería de Educación envió personal para retirar el material que quedó esparcido por el centro y subsanar los daños registrados, entre los cuales se cuenta también la caída de un árbol dentro del recinto escolar.

La tormenta, de corta duración, llegó acompañada de un fuerte viento que, en cuestión de minutos, arrancó las chapas de la vivienda de Luis Armesto, dejando a la intemperie su terraza, el comedor y la zona del horno. Los daños en su domicilio fueron cuantiosos, incluidos varios muebles, y obligaron a este vecino a colocar lonas y cubos de agua para evitar que le lloviese dentro de casa.

"Nunca vira nada así na miña vida", dice Armesto, a quien la fuerza de la tormenta dejó estupefacto. Según explica, los destrozos en su vivienda fueron cuantiosos y dejaron parte de su hogar inutilizado para el día a día.

Ahora tendrá que reponer madera y chapa en unos 120 metros cuadrados de superficie, además de arreglar otros daños como la chimenea del horno o unos canalones, trabajos que prevé realizar en cuanto le llegue el material.

Nada más producirse el suceso, varios vecinos de Oural acudieron a la casa de Luis Armesto para ayudarle colocando plásticos en el tejado o retirando los múltiples restos esparcidos por el entorno. El afectado quiere tener un agradecimiento para "as casas Penedo, Hilario, Noceda, Pacita e Manolo, para a carteira María del Mar, Damián, Sheila, Liliana e Miguel", que le echaron una mano en esos momentos complicados.

La tormenta dejó un reguero de incidencias en el municipio de Sarria, donde hubo que retirar numerosos árboles caídos a causa del fuerte viento. En la parroquia de San Martiño de Loureiro los vecinos informaron de la pérdida de dos árboles centenarios y también arrancó ejemplares en el entorno de la calle Riosol del casco urbano, entre otros muchos lugares.

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