Dos pubs de la zona de vinos de Sarria afrontan sanciones que rondan los 4.000 euros por incumplir los horarios de cierre, una problemática que suscitó el pasado año numerosas quejas por parte de los vecinos del entorno.
Las propuestas de sanción afectan a un pub de la calle Gregorio Fernández y a otro establecimiento de ocio nocturno, en este caso con la consideración de tablao flamenco, situado en la Rúa Diego Pazos. Hace ya meses, ambos locales fueron objeto de inspecciones por parte de la Policía Local y la Guardia Civil, fruto de las cuales se levantaron actas conforme estaban abiertos fuera del horario máximo establecido por la ley.
De este modo, las comprobaciones realizadas por los agentes permitieron determinar que permanecían activos incluso en algún caso a las nueve de la mañana.
En la actualidad, es competencia de los ayuntamientos incoar, instruir y resolver los expedientes sancionadores por incumplir el horario de cierre. Según la Lei de Emprendemento de Galicia, este tipo de hechos tienen la consideración de infracciones graves, que conllevan multas de 300 a 30.000 euros e incluso pueden implicar otras medidas como suspensión de la actividad o clausura.
La Administración autonómica determina el horario de cierre de cada tipo de establecimiento, siendo el más tardío (5.30 horas), el de discotecas, salas de fiesta y tablaos flamencos, ampliable en media hora de jueves a domingo y los festivos y vísperas de festivo.
QUEJAS VECINALES. En la zona de vinos de Sarria hubo multitud de protestas vecinales a lo largo del pasado año por incumplimiento del horario de algunos locales, así como por exceso de ruidos.
Varias personas que residen en este entorno incluso constituyeron una asociación denominada As Casetas, la cual presentó escritos en el Concello denunciando esta problemática y pidiendo la adopción de medidas. También trasladaron sus quejas a la Subdelegación del Gobierno en Lugo.
Además, residentes en esta zona comunicaron de nuevo el pasado mes de diciembre actos de vandalismo, consistentes en desperfectos en el mobiliario urbano, tales como jardineras tumbadas, o cristales tirados en la vía pública.
Un zorro protagonizó una anécdota en la noche del sábado al domingo al pasear por la calle Calvo Sotelo de Sarria, a la altura de la zona en la que se localizan varios pubs.
Las personas que estaban de fiesta entre la 1.30 y las 2.00 horas se quedaron sorprendidas al ver cómo el animal "ía polo medio da calzada a paso rápido" y en dirección al centro de la localidad, explicó un testigo del suceso.
"Levaba algo na boca"
Según dijo, el zorro "levaba algo na boca", que algunos interpretaron como los restos de una gallina. Varios jóvenes hicieron amago de espantarlo y se le perdió la pista. Otros intentaron fotografiarlo con sus móviles. "Foi algo un pouco surrealista", comentaron.
