¿Qué fue de... Mónica Legaspi?

Doctorada en Economía Aplicada, Mónica Legaspi Díaz es desde 2011 la interventora de la Diputación Provincial de Ourense.  Antes, pasó por Monforte, O Saviñao, Chantada, Xinzo de Limia y O Carballiño. Da clases de estrategia empresarial y forma parte del consejo de la entidad Sogarpo
Mónica Legaspi, en su despacho de la Diputación de Ourense. EP
photo_camera Mónica Legaspi, en su despacho de la Diputación de Ourense. EP

Han pasado casi 20 años de la mayor crisis institucional del Ayuntamiento de Monforte, siendo la protagonista involuntaria la por aquel entonces interventora de la administración local, una mujer llamada Mónica Legaspi Díaz. Su forma de actuar causó importantes tensiones entre el funcionariado y en el equipo de gobierno, en manos del Partido Popular de Nazario Pin. Fue tal el estrés generado por la manera de trabajar de la interventora que dos ediles populares, José Carlos Pérez y Aida Menéndez, se aliaron con los partidos de la oposición para abrirle un expediente disciplinario a Legaspi.

Esta doctora en Economía Aplicada, número cuatro de España en las pruebas selectivas de 1998 para el acceso a la subescala de Intervención-Tesorería, escala de funcionarios de la administración local con habilitación de carácter nacional, aterrizó en Monforte en el mes de agosto del año 2000. Desde el primer momento impuso un modelo de funcionamiento que chocaba con el que se arrastraba desde muy antiguo en la administración local. Dejó de haber privilegios y tratos de favor, lo que molestó tanto a trabajadores municipales como al primer teniente de alcalde, José Carlos Pérez, y la edil responsable de cultura, Aida Menéndez.

Mónica Legaspi, con funcionarios del Ayuntamiento de Monforte de su departamento. AEP
Mónica Legaspi, con funcionarios del Ayuntamiento de Monforte de su departamento. AEP

Ambos creyeron que se atribuía poderes que no le correspondían. Su malestar era tal que no pasó desapercibido para el portavoz socialista Jaime Vázquez. Vio con claridad que podía crear un cisma en el gobierno de Nazario Pin.

Y así fue. Jaime Vázquez propuso abrirle un expediente disciplinario a la interventora, moción que fue secundada por Pérez y Menéndez, dejando a un lado la disciplina de partido y abandonando a su suerte a Pin, defensor de Legaspi, poco antes de las elecciones locales

El largo proceso, lleno de historias escabrosas como posibles insultos a funcionarios ya fallecidos, llegó a los juzgados y se convirtió en un circo mediático, con graves acusaciones entre unos y otros que no pararon hasta la marcha de Legaspi a Chantada, donde estaba, junto al Ayuntamiento de O Saviñao, como interventora.

El resultado de todo aquel largo y doloroso proceso fue un año de inhabilitación y, según muchos en el Partido Popular, la pérdida de la alcaldía por parte de Nazario Pin en los comicios de 2003.

Dos décadas después de aquella dura situación, Mónica Legaspi vive y trabaja en Ourense, donde ejerce de interventora en la Diputación.

Asegura que no le guarda rencor a nadie, aunque también dice que no se olvida de todo lo sucedido y del interés de algunos por retratarla, al igual que en las películas, "como la mala malísima".

Mónica Legaspi, sentada durante el juicio. AEP
Mónica Legaspi, sentada durante el juicio. AEP


Para Legaspi resultó "una superexperiencia, que viví con solo 26  años (en referencia a cuando llegó a Monforte). Echando la vista atrás, con los 49 que tengo ahora, puedo decir que aprendí muchísimo de todo aquello".

No descarta que llegado un día recopile todo lo pasado y lo plasme en forma de libro, pues "este tipo de cosas, esta gran aventura, solo te pasan una vez en la vida".

Por lo demás, Mónica Legaspi, con dos hijos, uno de 7 y otro de 14 años, sigue dando clases, en concreto de Estrategia Empresarial, y está en el consejo de Sogarpo, una sociedad de gestión financiera cuya misión fundamental es ayudar a las pymes.

Toda esta intensa actividad no le impide regresar a Monforte con asiduidad, "donde tengo grandes amigos y una ahijada".

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