Cómo modernizar el sistema de gestión de almacenes por RFID

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La tecnología RFID es una forma de comunicación inalámbrica entre un lector y un emisor. En primera instancia, puede parecer que se trata de una forma de comunicación muy novedosa, sin embargo ya lleva algunas décadas de existencia.

Así, desde hace mucho tiempo se viene usando en dispositivos anti robo, principalmente en tiendas de ropa y supermercados, aunque se pueden ver en cualquier establecimiento.

No obstante, los sistemas RFID derivan en muchas otras aplicaciones de gran utilidad a nivel industrial y comercial. Desde llaves para coches, identificaciones para mascotas o el rastreo de equipajes y seguimiento de mercancías, siendo este último el de mayor interés en la actualidad.

En este sentido, la tecnología RFID es equiparable a un código de barras. Pero en lugar de emplear barras impresas con tinta, utiliza ondas de radio de determinado alcance según la frecuencia de onda que se maneje.

De esta forma, la identificación por RFID facilita la lectura y escritura a distancia y en movimiento de uno o más objetos. Todo esto, sin necesidad de mantener un contacto físico directo entre la etiqueta y el lector. Por lo tanto, las posibilidades son muy variadas, según se determinen estos dos elementos básicos.

En todo caso, las ventajas de este tipo de tecnología para la gestión de almacenes son muy amplias. Aunque siempre conviene acudir a una tienda online especializada en productos RFID therfidstore.eu, a fin de conseguir todo lo necesario, así como la mejor asesoría.

Etiquetas RFID

Las etiquetas o tags RFID, son pequeños dispositivos que se adhieren a diferentes ítems para su seguimiento. Para ello, estas etiquetas disponen de antenas capaces de recibir y responder peticiones por medio de señales de radiofrecuencia.

De esta forma, el emisor puede rastrear el producto al que se ha puesto la etiqueta. Incluso si este no se encuentra dentro del campo visual del lector. Lógicamente, esto sucederá siempre que este se encuentre dentro del rango de la señal de radio. En este sentido, para la gestión de inventarios se aconseja el uso de etiquetas por radiofrecuencia a 13.56MHz. Pues, ofrecen los mejores beneficios en relación a alcance, peso y tamaño.

Estas etiquetas, son ideales para introducirse en diferentes tipos de mercancías, favoreciendo la logística y seguridad. Además, permite almacenar grandes cantidades de información para la identificación del producto: nombre, precio, modelo y marca, solo por mencionar algunos.

De acuerdo con esto, las etiquetas de RFID son tan indispensables como la contratación de un Hosting SSD, para las empresas de cualquier sector. Así, algunos ejemplos de su uso para el control de inventarios son las bibliotecas que emplean los tag RFID para rastrear los libros. Asimismo, los almacenes de ropa para el registro y comprobación de las mercancías existentes.

Lector RFID

Cuando se administran inventarios y almacenes por medio de la tecnología RFID, los lectores son tan importantes como las propias etiquetas. Pues, por medio de este se consigue llevar el respectivo control de los productos que se ha etiquetado.

De esta forma, el registro de productos se actualiza cuándo llega mercancía a tienda, al igual que cuando esta se vende. También permiten llevar indicadores importantes como la rotación de los productos, al registrar el tiempo de permanencia en la tienda o el almacén.

Estos dispositivos son fácilmente instalables en conexión con los ordenadores de la empresa, con la finalidad de facilitar los registros pertinentes en el inventario. De esta forma, se crea un enlace de control entre los stocks de mercancía, la gestión de ventas y la logística.

Por otra parte, según nos dicen los responsables de NoSoloPymes, los modelos centrales o fijos son ideales para mantener el inventario actualizado. Pues, pueden ver las etiquetas en distancias de hasta 90 metros. Para ello, deben conectarse en una antena central, a fin de que consigan acceder a todas las etiquetas del área sin la necesidad de intervención humana.

Por su parte, los lectores RFID de mano disponen de su propia antena, permitiendo que puedan moverse de una zona a otra. Son más prácticos en circunstancias que requieren una evaluación unitaria de la mercancía.

Ventajas de los sistemas de gestión de almacenes por RFID

No hay lugar dudas, los sistemas RFID ofrecen grandes ventajas para cualquier empresa que requiera llevar una adecuada gestión de almacenes. En especial si se comparan con otras herramientas como el código de barras.

En este sentido, destaca particularmente la posibilidad de administrar el inventario de manera global, en lugar de hacerlo uno a uno. En este sentido, se consigue facilitar y agilizar los procesos contables y de inventario. Además, tal como leemos en el portal hazunaweb.com, se trata de una tecnología económica y fácil de implementar.

Asimismo, se consigue reducir el trabajo manual, y en consecuencia los posibles errores propios de este tipo de procedimientos. Por último, se obtiene un inventario actualizado en todo momento con datos e información en tiempo real.