En un acto cargado de lágrimas, emoción y cientos de recuerdos, As Pontes rindió un emotivo homenaje a Ignacio Echeverría. El joven asesinado en los atentados de Londres el pasado mes de junio, conocido como el héroe del monopatín, será recordado en la historia y en el callejero de la que fue su localidad natal, dando nombre al parque del Poboado do Anguieiro, el lugar donde vivió sus primeros nueve años.
Fueron sus padres, Joaquín Echeverría y Ana María Miralles del Imperial, los encargados de descubrir, junto al regidor, Valentín González Formoso, una placa que ensalza el compromiso con la solidaridad y la libertad de Ignacio, "sempre o noso veciño", reza el monolito en memoria del héroe de Londres.
"De aquí se llevó sus recuerdos, la educación de su colegio, la amistad de sus amigos y la nostalgia a la que llamáis morriña", expresó Joaquín Echeverría, que se mostró "emocionado de volver" y quiso agradecer al Concello y a los vecinos "el acto y el cariño".
El joven asesinado en los atentados de la capital inglesa en junio vivió sus primeros nueve años en el Poboado do Anguieiro
"Cuando nos fuimos, Ignacio escribió cartas a sus amigos, que como era un niño nunca llegó a enviar. Pero cuando me prejubilé, repasando fotografías y papeles en casa, aparecieron esas cartas. Y por esas cosas quiero que sepáis que Ignacio era nuestro, en el sentido amplio de la palabra, era de mi familia, aunque era una persona abierta que tomaba sus decisiones, y era vuestro, porque participó en comunidad con vosotros", dijo Joaquín Echeverría sin poder contener las lágrimas.
"Hace mucho que no venía y está absolutamente cambiado. Nos sentíamos en deuda. El paso del tiempo y las distancias alejan, pero lo hicimos con gusto, estamos muy agradecidos. Aquí pasamos muchos años y están inscritos tres de mis hijos", expresó el padre de Ignacio, una vez terminado el acto.
"Es una herida que no se va a curar nunca", apuntó, y regresó a los recuerdos. Señaló la acera por la que recordaba ver jugar a su hijo y bajar en monopatín, al lado del portal en el que vivieron, frente al parque que ahora llevará su nombre. "No eran monopatines como los de ahora. Pero no era muy habilidoso entonces", añadió con una medio sonrisa, y reconoció que le llegó a sorprender ver alguno de los vídeos que se publicaron de cómo patinaba de mayor.
En el acto, en el que también se presentó la lluvia, los padres de Ignacio estuvieron rodeados de caras conocidas del pasado, antiguos amigos y compañeros, y vecinos que simplemente quisieron apoyar el homenaje. También hubo representación de toda la corporación municipal.
"Nosotros, como villa donde Ignacio se crió, donde por deseo expreso de sus padres se inscribió en el registro -él y dos de sus cuatro hermanos- y así figura, nacido en As Pontes de García Rodríguez, teníamos esa deuda con él", dijo el regidor pontés. "La valentía y esos valores que demostró Ignacio cuando se enfrentó a un acto terrorista en el que perdió la vida, los aprendió en esa familia y en buena parte los aprendió en este pueblo. Por eso le debíamos esto", añadió González Formoso.
