El robo de otro Seat León en el municipio de Vilalba movilizó a lo largo de la madrugada de este miércoles a varias patrullas de la Policía Nacional de Lugo, un dilatado despliegue que finalizó con un detenido por conducción temeraria y atentado. Este caso engrosa la extensa lista de robos de vehículos de la misma marca y modelo, que posteriormente son utilizados para cometer otros delitos, por lo que la Policía Nacional mantiene abierta una investigación para atar cabos y determinar si estos robos son obra de uno o de varios grupos diferentes.
El despliegue policial de este miércoles se inició cuando la Guardia Civil comunicó a la sala del 091 que se había producido el robo de un vehículo Seat León en el municipio de Vilalba. La Policía Nacional montó de inmediato un dispositivo para controlar todos los accesos a la capital y localizó al vehículo cuando circulaba por la autovía A-6.
Los agentes iniciaron entonces una persecución, pero el conductor pisó el acelerador y superó los 200 kilómetros por hora, por lo que logró fugarse. La Policía lo perdió de vista, pero tan solo unos minutos más tarde, el turismo apareció abandonado y envuelto en llamas en la zona de Nadela, en una finca próxima a la autovía.
Sin embargo, con el hallazgo del vehículo robado, la Policía Nacional no dio por finalizada su intervención y mantuvo abierto el dispositivo. Así, mientras realizaban labores de vigilancia, una patrulla de paisano que circulaba en un coche camuflado observó a un vehículo sospechoso. Tal y como confirmó este miércoles el portavoz policial, "se trataba de un vehículo tipo monovolumen, cuyo titular y conductor habitual había estado implicado en varios delitos en los que se había empleado la fuerza". Los agentes comenzaron a perseguirlo y el conductor emprendió la huida a gran velocidad "y con un desprecio total por la seguridad de los demás usuarios de la vía".
La Policía Nacional mantiene abiertas las pesquisas para confirmar si el hombre estuvo también implicado en el robo del Seat León denunciado en Vilalba
EN FUGA. El sospechoso invadió el carril contrario de circulación y rebasó la línea continua de la circunvalación de la Nacional VI, "teniendo los demás usuarios que apartarse para no colisionar". El hombre hizo caso omiso de todas las indicaciones de los agentes y siguió su camino por la Estrada Vella de Santiago y por la zona de Orbazai, superando en ocasiones los 180 kilómetros por hora. Finalmente, en las inmediaciones del Club Fluvial de Lugo, el conductor perdió el control del vehículo, se salió de la carretera y se empotró contra un viejo lavadero ubicado en el medio de una finca.
Los policías se acercaron al vehículo siniestrado para comprobar si el conductor se encontraba herido y observaron que no había sufrido lesiones importantes. De hecho, el hombre se encaró con los agentes e intentó fugarse, por lo que tuvieron que reducirlo. Finalmente, fue detenido e imputado por un delito de conducción temeraria y por otro delito de atentado a los agentes de la autoridad.
La Policía Nacional mantiene abiertas las pesquisas para confirmar si el hombre —de origen marroquí y con domicilio en la capital lucense— estuvo también implicado en el robo del Seat León denunciado en Vilalba. El detenido tiene ya a sus espaldas más de una decena de antecedentes por diferentes delitos, como robo o lesiones, entre otros.
Fáciles de abrir
Los delincuentes eligen este modelo, junto al Seat Ibiza, porque supuestamente tienen cerraduras de fácil apertura si se usan inhibidores de frecuencia.