El centro integral de salud de A Residencia recibe este jueves dos empujones definitivos. El Concello prevé aprobar por la mañana la licencia de obras y el Consello de la Xunta acordará habilitar el crédito para licitar las obras, por importe de 12.023.074 euros.
La Xunta estima que las obras se puedan contratar en junio y el plazo estimado de construcción es de veinte meses. El edificio ocupará 8.083 metros cuadrados, de ellos 5.337 útiles, distribuidos en 6 plantas (de la -1 a la 4).
El proyecto que se licita supone construir el centro integral de salud de A Residencia a partir de la rehabilitación del antiguo Hospital Materno Infantil, sin uso desde que entró en servicio el Hula.
El proyecto plantea que las áreas de circulación y de espera sean espacios con luz natural y vistas, buscando una imagen limpia e innovadora
El plan es que ese nuevo complejo sanitario agrupe varios servicios, entre los que los más destacados son el nuevo centro de salud del A Residencia y el futuro PAC de la ciudad, con servicios que no tiene el de Fingoi, como radiología.
El futuro centro de salud tendrá entrada por la fachada principal del complejo, con accesos independientes, y accesibles, para peatones y vehículos. El acceso al PAC estará separado y será por la fachada trasera del edificio, en la parte más alta de la parcela.
Se generarán patios a partir del vaciado de parte del volumen existente para aportar una entrada de abundante luz natural y generando a su vez fachadas interiores
En el futuro complejo estará también la unidad de salud mental, que ocupará la primera planta del edificio y tendrá acceso por la parte trasera del edificio.
En el inmueble tendrá una base el 061, con acceso también por la parte posterior y sede en la planta menos uno del complejo.
La intervención en el Materno busca volver a la estética del proyecto original de 1950, limpiando los volúmenes añadidos y eliminando las cubiertas de fibrocemento y edificaciones añadidas, creciendo solo lo necesario para albergar los nuevos usos del 061 que no tienen cabida en la edificación principal, pero respetando la edificación original, que tras la intervención será exenta, por lo que queda más abierta a la ciudad.
