Un pederasta de Lugo acepta ocho años y medio de cárcel y diez sin usar las redes sociales

Al reconocer los hechos, acepta la medida de prohibición de acceder a todo tipo de chats ► Le pagó a la víctima, un menor de 13 años, por realizar prácticas sexuales con él
El pederasta, en el juicio en la Audiencia de Lugo. EP
photo_camera El pederasta, en el juicio en la Audiencia de Lugo. EP

El pederasta lucense que iba a ser juzgado este jueves en la Audiencia Provincial de Lugo aceptó una pena de ocho años y medio de cárcel por pagarle a un menor al que conoció por internet a cambio de realizar prácticas sexuales con él, unos encuentro en los que además hizo fotografías que después difundió.

El acuerdo alcanzado entre las partes contempla una condena de cinco años por abuso sexual, un año por prostitución de menores y dos años y medio por pornografía infantil. Además, el acusado no podrá usar redes sociales durante diez años. 

Esa era una de las penas que solicitaba el ministerio público, que inicialmente pedía además 23 años y medio de prisión para el pederasta lucense. 

Al reconocer los hechos, el ya condenado acepta la medida de prohibición de acceder a todo tipo de chats, incluido el Whatsapp, durante una década. En caso de incumplir esta medida, el hombre incurriría en un nuevo delito de quebrantamiento de condena, una conducta que también está castigada con pena de prisión.

El menor tenía 13 años cuando contactaron a través de Grindr

Tal y como se recoge en el escrito de acusación del ministerio público, a principios del año 2020, el acusado contactó con un menor —que en aquel momento tenía 13 años de edad— a través de la red social Grindr y ambos se intercambiaron fotografías. Tras mantener varias conversaciones por el chat, el acusado le propuso que se conocieran en persona y el niño aceptó, por lo que lo recogió en su coche y lo llevó hasta su domicilio, sito en la capital. Una vez en la vivienda, el hombre realizó varias prácticas sexuales con el menor, una conducta que se repitió en dos ocasiones más, también a principios de 2020.

Según el relato de la Fiscalía, en la primera ocasión, el acusado le prometió al menor que le daría 20 euros "a cambio de la conducta sexual", pero finalmente no se los entregó. En los otros dos encuentros, el hombre le dio 20 y 10 euros, respectivamente. Además, en dichas citas, el procesado obtuvo fotografías, "guiado por el propósito de satisfacer sus deseos sexuales".

Antes del acuerdo, la Fiscalía solicitaba 23 años de prisión

El ministerio público relata igualmente en su escrito de conclusiones provisionales que el 2 de febrero de 2020, sobre la una del mediodía, el acusado mantuvo una conversación con otra persona en el chat denominado Chateagratis.net. El otro usuario le dijo que realizaba prácticas sexuales con su hijo y con su sobrino menor y ambos llegaron a un acuerdo para intercambiarse fotografías de contenido pornográfico. De este modo, el acusado le mandó varias fotos que había realizado presuntamente en sus encuentros que había mantenido con el menor en su domicilio. Las imágenes recogían contenido sexual explícito.

Finalmente, el 27 de enero de 2021, agentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad practicaron un registro en la vivienda del acusado, autorizado por el juzgado de Instrucción número 2 de Lugo, en el que le fueron intervenidos el teléfono móvil, el ordenador y cuatro memorias USB. Tras realizar las pesquisas necesarias, el hombre fue acusado de un delito continuado de abuso sexual sobre menor de 16 años con acceso carnal, otro de prostitución de menores y otro delito de elaboración y distribución de pornografía.