El Concello de Lugo anunció este martes la adopción de varias medidas para ahorrar agua y anticipó que, si la situación de sequía se prolonga, aplicará una reducción todavía mayor del consumo. "A vontade do goberno local é adecuarse á realidade hídrica que vivimos", afirmó la alcaldesa, el concejal de medio ambiente, Miguel Fernández, quien explicó que el objetivo es tratar de evitar, en la medida de lo posible, otro tipo de restricciones que ocasionen más molestias a la ciudadanía.
De momento la medida más drástica se acaba de aplicar en el lavado de calles, que se reduce a la mitad. A partir de ahora en las calzadas se lleva a cabo un baldeo mecánico y dos mixtos -este último incluye un barrido manual básico- de lunes a sábado, como antes, pero en días alternos. El lavado de aceras y de plazas se mantiene de lunes a domingo, pero con una hidrolimpiadora en vez de con dos. "Utilizaranse 1.122,94 metros cúbicos de auga na limpeza das rúas cada mes, aínda que no caso se agravarse a situación baixarase aínda máis o consumo de auga nesta tarefa, ao 75% se se declara a prealerta e ao 90% en caso de alerta. Ou mesmo se eliminará, se así o considera necesario a Confederación Hidrográfica do Miño-Sil (CHMS), explicó el concejal de medio ambiente.
El servicio de limpieza de la ciudad utiliza una media de 2.245 metros cúbicos de agua al mes durante todo el año y en verano suele reducir el consumo a 1.797 metros cúbicos, pero ante la delicada situación que se vive, ahora bajará el gasto al 50%.
El Concello lucense también reducirá el gasto de agua en el riego de jardines y otras zonas verdes, en este caso, en torno a un 30%. Se priorizará el riego de los espacios más sensibles y de aquellos que tienen plantada flor de temporada. La cantidad de líquido se reducirá un 60%, e incluso un 90%, "se a CHMS determinase un empeoramento da seca", indicó Fernández.
El gobierno de Lara Méndez adopta estas medidas de forma preventiva y ante el llamamiento realizado por la CHMS a administraciones y a ciudadanos para que utilicen la menor cantidad de agua posible, ya que los ríos llevan un 40% menos de líquido que hace un año y hasta octubre no se esperan precipitaciones importantes. "Unha das principais bandeiras da acción política deste executivo é transformar Lugo para que sexa resiliente fronte aos retos que presenta o cambio climático, pero esa preparación esixe tamén de prevención, como a que xa estamos aplicando", afirmó el concejal de medio ambiente.
