Agentes de la Policía Nacional de Lugo consiguieron recuperar un móvil robado que estaba siendo utilizado por una menor de edad y que supuestamente había sustraído su padre, quien acabó imputado como presunto autor de un delito de hurto.
La denuncia por el robo del móvil fue presentada el pasado 12 de enero, cuando el propietario del terminal acudió a comisaría y explicó que se había dejado el teléfono encima de la barra del bar donde trabaja, pero al finalizar su jornada, cuando fue a recuperarlo, ya no estaba. Los agentes abrieron entonces una investigación y detectaron que el móvil se encontraba en manos de una chica, menor de edad. Los agentes hablaron con su progenitor y el hombre les dijo que se lo había comprado a un hombre con el que se había cruzado por la calle. Sin embargo, tras prestar declaración en dependencias policiales, los investigadores le imputaron un delito de hurto y trasladaron las diligencias al juzgado. Al imputado le constan al menos otras diez detenciones anteriores por delitos de robo y hurto.
La Policía Nacional imputó a otras dos personas por hurtar móviles en la capital. Uno de ellos fue vendido en una tienda de segunda mano
Los agentes de la Policía Nacional imputaron además a otras dos personas por hurtar móviles. Uno de ellos fue vendido en una tienda de compraventa de artículos de segunda mano, mientras que el otro fue recuperado por la Policía Local cuando estaba en manos de dos chicos que trataron de ocultarlo en el adarve de la muralla.
