El juzgado de lo Penal número 2 de Lugo impuso una condena de seis meses de prisión, 1.080 euros de multa y 33 meses de retirada de carné a un conductor ebrio que se negó a realizar la segunda prueba de alcoholemia.
Los agentes lo sorprendieron al volante de su turismo el 12 de julio de 2020, alrededor de las nueve y media de la noche, y comprobaron que presentaba "síntomas de embriaguez", por lo que lo sometieron a la prueba, en la que arrojó un resultado de 0,90 miligramos por litro de aire espirado, casi cuatro veces más de lo permitido.
Los policías le pidieron que se sometiera a una segunda prueba en el etilómetro de precisión, pero el conductor se negó, por lo que fue acusado de dos delitos contra la seguridad vial.
En el juicio, el acusado alegó que no era él quien conducía el turismo y aseguró que se había sometido a cuatro pruebas de alcoholemia. Sin embargo, el juez consideró que su versión no era creíble. De hecho, los agentes declararon que el hombre estaba en el asiento del conductor, se había sometido a la prueba y les había explicado que había bebido "cinco o seis copas".
El procesado presentó un recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Lugo y la sala confirmó la condena que le había impusto el Penal número 2.
