Los forenses hallaron semen del acusado de abusar de su hijo en el cuerpo y ropa del menor

Fiscalía y acusación piden para el progenitor, por unos hechos ocurridos en A Coruña, una pena de 15 años de cárcel
Audiencia Provincial de A Coruña. EFE
photo_camera Audiencia Provincial de A Coruña. EFE

Forenses han ratificado la presencia de semen del acusado de agredir sexualmente a su hijo en A Coruña, y de manera continuada, en varias partes del cuerpo de la víctima, así como en prendas pertenecientes al mismo. Lo han hecho en la segunda sesión del juicio que se celebra en la Audiencia Provincial de A Coruña. 

El progenitor, que se declaró inocente en su declaración, está acusado de agresión sexual a su hijo entre 2014 y 2019, unos hechos por los que Fiscalía y la acusación particular piden 15 años de cárcel y hasta 60.000 euros de indemnización. 

En su testimonio en la segunda sesión del juicio, las forenses concluyeron que había "restos de semen y saliva" en la espalda, zona perianal y zona anal del menor tras la exploración que se le realizó después de la denuncia de agresión sexual, en mayo de 2019. A su vez, preguntas de la fiscal, agentes de la Policía Científica se remitieron al informe en el que confirmaron la existencia de restos de esperma del acusado en distintas prendas encontradas en el domicilio, como en una camiseta y una prenda de ropa interior. 

Otros dos policías relataron cómo recogieron estos objetos del domicilio que compartían ambos mientras la víctima permanecía en el hospital siendo examinada. También aportaron al laboratorio, comentaron, la alfombra y la cubierta de la cama de la habitación del menor.

DURANTE CINCO AÑOS. En la primera sesión del juicio, el acusado negó los hechos, mientras que la víctima relató que las agresiones sexuales se producían cada vez que estaban "solos en casa". Los hechos, según su testimonio, se produjeron a partir del año 2014, cuando tenía 12 años, hasta 2019. 

En su escrito de calificación, el Ministerio Público señala que el hombre creó "un clima de dominación" que hizo "ceder al menor y contra su voluntad" a realizar estos actos y "actuando convencido de que no contaría nada de lo que hacía". La Fiscalía asegura que, debido a lo sucedido, el menor sufrió trastornos físicos y emocionales, con afectación en su interacción social y en el rendimiento escolar.