El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado este martes que cumplirá su "deber" y seguirá su ronda de contactos con los grupos parlamentarios para conformar una mayoría, dado que, según ha recalcado, España "merece estabilidad" y "no un desgobierno". En este sentido, ha advertido de que sería "un inmenso error que gobernasen los independentistas", a los que "no les interesa" el país.
"A mí sí me interesa España y acabo de recibir un mandato de las urnas de intentar conformar una mayoría estable para que haya un Gobierno en España y no un desgobierno", ha declarado Feijóo a los periodistas en Santiago de Compostela después de participar en los actos con motivo de la festividad de Santiago Apóstol.
Al ser preguntado si va a seguir recabando apoyos para la investidura a pesar de la negativa del PNV, Feijóo ha señalado que su "obligación es hablar con los grupos" y ha añadido que en la misma noche electoral del 23 de julio, el candidato socialista, Pedro Sánchez, le propuso "empezar a hablar después del recuento del voto Cera", relativo a los españoles que residen en el exterior. "Entiendo yo que en los primeros días de agosto, una vez finalizado el voto Cera, tendremos que hablar con la segunda fuerza política, que es el Partido Socialista", ha subrayado. Sin embargo, desde Ferraz este lunes aplazaban ese encuentro al mes de septiembre.
En busca de la "estabilidad"
El líder de los populares ha subrayado que "España merece estabilidad" y ha recordado que están presidiendo en este momento la presidencia de turno de la Unión Europea y negociando en Bruselas la regla de gasto. "En consecuencia, vienen tiempos en los que se necesita estabilidad, mucho europeísmo y mucha centralidad, y creo que sería un error, un inmenso error, que en España gobernasen los independentistas", ha proclamado, máxime cuando, según ha destacado, esas formaciones han perdido apoyos en las generales y "los partidos de Estado" los han ganado.
Por eso, Feijóo ha confirmado que seguirá su ronda de contactos. "Yo es evidente que cumpliré mi deber y es evidente que intentaré hablar con los grupos para darle a España lo que España ha votado en las urnas", ha apostillado.
Preguntado entonces si irá a la investidura aunque no tenga los apoyos suficientes, Feijóo ha recordado que Unión del Pueblo Navarro (UPN) y Coalición Canaria (CC), que tienen un escaño cada uno, "están en la mejor disposición". "Yo creo que decir que no se tiene apoyo simplemente por haber hablado con algún grupo, me parece una conclusión precipitada", ha manifestado, en alusión al no que expresó este jueves el PNV a través de un comunicado.
Negociaciones con PSOE y Vox
Por eso, ha señalado que hablará "en las próximas semanas con el Partido Socialista y con Vox" y ha reiterado que es "muy importante que España mande un mensaje a Europa de que la presidencia de turno es algo serio que España no puede desaprovechar".
Sánchez se da unas semanas de margen
Por su parte, el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, pretende afrontar sin prisas los contactos con otras fuerzas políticas con el fin de recabar apoyos para intentar su investidura y no se los plantea hasta la segunda quincena de agosto, después de que se constituyan el Congreso y el Senado.
La formación de las nuevas Cortes es el primer hito de la legislatura y fuentes del Ejecutivo subrayan que hay que darse tiempo, ir paso a paso y esperar primero a que se constituya el nuevo Parlamento dando protagonismo a los diversos grupos que lo van a conformar. Por eso emplazan hasta entonces y evitan elucubrar sobre cómo podría ser una negociación con Junts, la formación de Carles Puigdemont cuya abstención sería imprescindible para que Sánchez pudiera ser investido.
De ahí que de momento se limiten a hacer hincapié en que el jefe del Ejecutivo no permitirá que se sobrepase el marco constitucional ante la condición de Junts de que, para contar con sus votos, haya amnistía y un referéndum de autodeterminación en Cataluña.
Sumar anunció el lunes que ha encargado al exportavoz de los comunes en el Congreso Jaume Asens que lidere las negociaciones con Junts aprovechando su buena relación con Puigdemont, pero en Moncloa niegan que pueda hablar también en nombre de Sánchez. Sí reconocen, no obstante, la determinación de que haya esa investidura y aseguran que próximamente hablarán con todos los grupos que puedan hacerla posible.
Tras la vorágine electoral y después de que se haya celebrado este martes la última reunión del Consejo de Ministros antes del paréntesis vacacional, Sánchez se tomará en breve un descanso. Mantendrá de momento agenda, que incluirá un despacho ordinario con el rey en el Palacio de la Zarzuela y que sustituirá al tradicional que se celebra todos los meses de agosto en el Palacio de Marivent, en Mallorca.
Díaz admite que la negociación con los grupos será compleja
La líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha admitido que las negociaciones para la investidura con los grupos parlamentarios serán complejas, dado que los "votos no se dan a cambio de nada", pero está convencida de que fructificarán, desde el diálogo y discreción, para dar como resultado un gobierno de coalición estable.
En cuanto al panorama con Junts, que demanda amnistía y referéndum de autodeterminación, ha trasladado que en todas las negociaciones se parten con peticiones de partida, "legítimas", pero que no se deben tener "líneas rojas" y al final las posiciones van convergiendo hasta dar con un acuerdo, como ha ocurrido desde su experiencia en el diálogo social.
También ha manifestado, en declaraciones a La Sexta recogidas por Europa Press, que la posición de Sumar en Cataluña pasa por potenciar el diálogo, la mesa de negociación y la votación por parte de la sociedad catalana del acuerdo de "mayorías" que salga de ese órgano.
Eso sí, ha manifestado que todas las negociaciones luego van a ir fluyendo y avanzando "dentro de los márgenes democráticos" que cada uno se dé, no solo con Junts sino con el resto de posibles socios parlamentarios. "Dialogar es ceder entre ambas partes", ha apostillado.