Levantarse rápido a pesar de la dureza de la caída. Reponerse de inmediato en Fuenlabrada para olvidar el tropiezo del derbi frente al Deportivo. Ese es el objetivo de un Lugo que jugará este domingo (12.00 horas) en el Fernando Torres con los rescoldos del 0-3 encajado ante los herculinos todavía humeantes.
No puso paños calientes al resultado de la pasada jornada el técnico Pedro Munitis. El cántabro admitió que caer ante el Dépor fue "un palo" para un equipo que había tenido muchas "expectativas" puestas en el derbi. Pero el 0-3 ya es pasado y el fútbol, a veces dictador, a veces dadivoso, le concede a los rojiblancos la opción de olvidar rápido el sinsabor de la derrota con la opción de la victoria.
Para volver al ánimo que aportó la remontada (2-1) a favor del duelo frente al Teruel, el marcador debe volver a ser positivo ante el conjunto madrileño. A pesar de la continua petición de paciencia por parte del entrenador y la plantilla, una derrota en el Fernando Torres frenaría la ilusión de la grada de volver a sonreír. Caer en Fuenlabrada no será grave en la tabla, con toda la temporada por delante, pero sí en el ánimo de una afición que desea disfrutar de un año de éxito tras una campaña, la pasada, en la que la palabra decepción se queda demasiado corta.
Deberá mejorar la versión ofrecida ante el Deportivo. Tendrá que recuperar la solidez del primer duelo ante el Teruel si quiere imponerse a un equipo, el Fuenlabrada, que tuvo más fútbol que resultados. El equipo kiriko mereció más ante la Cultural Leonesa y frente al Cornellá. La segunda parte fue superior al equipo leonés y contra los catalanes llevaron el peso del partido y contaron con ocasiones para haber sumado.
Es un conjunto con varios registros, capaz de controlar el partido con y sin balón, de moverse combinando en corto o jugar en largo, que realiza una presión alta y agresiva y que puede transitar con velocidad para llegar en pocos toques. Deberá estar fino el Lugo si no quiere que los robos de sus rivales lo penalicen. Tendrán sus mediocentros que controlar a Cristóbal y Galindo, sus dos futbolistas estrella, los jugadores que manejan la sala de máquinas madrileña.
Arriba deberá mejorar su pegada el equipo de Munitis, que pudo anotar en su debut pero se quedó seco de goles y ocasiones ante el Deportivo. Ahí tendrá que aparecer un hasta ahora desaparecido Víctor Narro para juntarse con Quintana y Ledesma para llegar, finalizar o surtir de balones a Adrián Fuentes. Porque ese cuarteto ofensivo apunta a titular en el 4-4-2 de Munitis. El entrenador cántabro descartó que el físico de Aranda le dé para salir de inicio, al igual que el de Jozabed. No así Antoñín, que podría disputarle el puesto de ‘nueve’ titular a Fuentes.
El resto del conjunto lucense podría ser el esperado. Lucas Díaz parece que seguirá bajo los palos, mientras que César Morgado y Gorka Pérez podrían repetir en el centro de la zaga, con Javi Vázquez como inquilino de la banda izquierda. En la derecha, tanto Torrado como Carlos Julio tendrían opciones para poder salir de inicio como carrilero por la derecha.
En la medular, Sabit tendrá un puesto asegurado para intentar frenar la capacidad de armar juego de Cristóbal y Galindo. Su compañero de línea debería seguir siendo Aguza para ejercer como llegador desde segunda línea.