Un derbi siempre es un partido especial. Se juega contra el vecino, contra el equipo al que se observa con el rabillo del ojo, al que se mira con atención en la tabla. Pero si el duelo contra el Deportivo se espera con ansiedad desde el mes de agosto, el derbi de hoy (20.00 horas) en el Ángel Carro es un encuentro que va más allá de la especialidad de enfrentar a dos clubes de la misma comunidad. El Lugo-Dépor de este domingo es un partido por la supervivencia, por la resistencia en una categoría en la que se juega desde hace siete años.
El conjunto rojiblanco quiere los tres puntos como alimento necesario para la vida, no como satisfacción momentánea por imponerse en un encuentro de máxima rivalidad. El triunfo le permitirá al Lugo seguir fuera del descenso, superar a un Tenerife que perdió ayer en Elche (3-0) e incluso ampliar distancias con el Rayo Majadahonda si los majariegos caen en Las Palmas. Ganar podría situarlos a la misma altura del Numancia de perder los sorianos en Oviedo y mantenerse a cuatro puntos de rivales directos como el Extremadura, que venció ayer en Alcorcón.
Salir indemne de un partido ante un favorito al ascenso le dará un espaldarazo moral. Mantener la confianza tras dos resultados positivos -el 4-2 ante el Almería y el 0-0 en El Molinón- puede suponer un impulso extra para afrontar los tres partidos que restan hasta el final.
Ganar será el primer paso para jugar con seguridad en Almendralejo, ante el Tenerife en casa en un duelo trascendental y en Tarragona, contra un Nástic ya en Segunda B.
Pero el derbi no será un partido más para el Dépor. En una campaña por debajo de las expectativas, los herculinos tienen casi imposible el ascenso directo y su lucha se centra en colarse entre los seis mejores.
Jugar el play off parece una obligación en A Coruña, una pelea en la que golpear en duelos como el de hoy es necesario ante la avalancha de duelos directos de sus adversarios en las próximas jornadas.
POSIBLE DEFENSA DE TRES. El Lugo ensayó durante la semana repetir la defensa de tres centrales y dos carrileros que el entrenador del Lugo, Eloy Jiménez, empleó en Gijón ante el Spórting. A pesar de las ausencias de Luis Ruiz y Gerard Valentín por sanción, el preparador de Hellín podría emplear a sus tres centrales principales: Vieira, Josete y José Carlos por delante de Juan Carlos, con Iriome como carrilero diestro y Campabadal cambiado de banda. En caso de optar por una zaga de cuatro, Campabadal formaría en la derecha y José Carlos ocuparía un puesto en el costado.
Por delante Seoane y Aburjania -con alguna opción para Pita- formarían por delante, con Lazo y Cristian Herrera en los costados y Manu Barreiro en la punta del ataque como delantero boya.
En caso de dibujar sobre el césped un 4-4-2, Iriome estaría en la derecha con Cristian y Manu Barreiro en la parte de arriba para tratar de hacer daño a la defensa del Deportivo.
