Un solitario gol de Genaro Rodríguez sirvió para romper la racha de cinco partidos sin perder del CD Lugo y, de paso, mantener el invicto del Málaga en el estadio La Rosaleda (1-0), donde suma dos empates y cuatro victorias.
Los de Albés comenzaron controlando y dominando el partido, cortando las líneas de pase de los malaguistas, formando un triángulo en el centro del campo que asfixió a Escassi y Jozabed, y defendiendo con firmeza las dos bandas, a Antoñín y Paulino de la Fuente.
El Lugo, valiente, no daba opción al Málaga, que intentaba coger el ritmo rápido que tanto le favorece, quizás porque empezó desordenado.
El tiempo transcurría y, poco a poco, con trabajo, los locales comenzaron a asediar el área visitante, aunque sin orden, con centros excesivamente comprometidos que no encontraban rematador al estar mal colocado su delantero referencia Sekou Gassama, que luchaba con los centrales Diego Alende y Ros, que le cerraban constantemente.
Paulino despertó para el equipo blanquiazul y por su banda, la derecha, llegaba el peligro en ataque, debido a que el Lugo ya tenía menos el balón, pero señalaba con sendas acciones a la zaga malaguista, blanda y titubeante.
Cuando el partido no generaba ocasiones, llegó un centro por la derecha del lateral Víctor Gómez y Genaro Rodríguez, con un gesto técnico impresionante, casi de espaldas y con la derecha, atinó con un remate que tocó el poste izquierdo y se introdujo en la portería de Fran Vieites.
El encuentro había cambiado por completo, con un Málaga algo más reposado, aunque el Lugo no se descompuso y tras el gol, en el minuto 32, volvió a dominar, con transiciones veloces por las bandas, sobre todo por la derecha, aunque la falta de poder ofensivo le estaba condenando a la derrota parcial en la primera parte.
Carlos Pita sustituyó a Diego Alende, con una amarilla, en el centro de la defensa del Lugo, en unos segundos cuarenta y cinco minutos que comenzaron con una ocasión del lateral del Málaga Víctor Gómez, inconmensurable e imperial, y cuyo disparo ocasionó graves problemas a Vieites, aunque salió fuera.
El Málaga tuvo posibilidades de sentenciar el partido, pero ni Antoñín ni posteriormente Jozabed Sánchez y Paulino lograban ese gol de la tranquilidad.
Los minutos pasaban, las piernas pesaban, y el Lugo adelantó líneas para intentar buscar la igualada, pero muy romo en ataque. El Málaga defendía las acciones a balón parado y los centros laterales con fuerza e intentaba salir al contragolpe buscando la velocidad de Brandon y la frescura del joven centrocampista Kevin Medina, que sustituyó a Antoñín, y un disparo suyo desde fuera del área hizo intervenir, en la mejor parada del partido, al buen guardameta Vieites.
El encuentro iba tocando a su final sin apenas movimientos a reseñar en ambas áreas, aunque quizás llegó mejor a ese tramo el Málaga, algo más fresco, menos desgastado que su rival, que había hecho un esfuerzo titánico para buscar la igualada, sin recompensa y premio, por la falta de pegada arriba, con una ocasión clarísima de Juanpe, que solo delante de Dani Martín en el área pequeña, no logró conectar un remate consistente y fuerte que fue a las manos del guardameta en el tiempo añadido.
Al final, 1-0, triunfo malaguista que le sirve para adelantar al Lugo, que cuenta con 15 puntos, por 17 del Málaga en la novena posición.
