El juzgado mercantil de Lugo declaró en concurso de acreedores a Congelados Troulo, que continúa con su actividad. Este mayorista, que se dedica a la distribución y venta de productos congelados, sobre todo pulpo, se encuentra en el polígono industrial de Rábade. Fue fundado en 1980 y tiene 14 empleados.
Los factores que abocaron a esta empresa lucense a presentar el procedimiento concursal, con un pasivo de 19 millones de euros, fueron varios, desde las restricciones por la pandemia a su principal cliente, la hostelería, o la subida de los precios del pulpo condicionada por las importaciones de Japón hasta que se triplicase el coste energético, clave en una empresa con potentes cámaras frigoríficas a temperaturas de entre 25 y 28 grados bajo cero.
La firma lucense, que destina a la exportación el 95% del pulpo que adquiere en Mauritania y Marruecos, vio en cinco años reducida su facturación de 40 millones de euros a 10. Junto a Troulo presentó concurso de acreedores Congelados Rábade, que comparte administrador. Esta firma, que tiene tres trabajadores, arrastra un pasivo de 2,8 millones.
El juzgado de primera instancia número 2 y mercantil de Lugo ha nombrado administrador concursal de estas sociedades al economista Alberto Leiro.
