Unas cincuenta personas volvieron a concentrarse en la tarde de este miércoles ante las oficinas de Portos de Galicia en Burela para protestar por la prohibición de pescar en algunas zonas que hasta hace poco tiempo estaban abiertas a los aficionados. En la reunión se habló de iniciar una recogida de firmas, ya que "a economía que move a pesca recreativa é importante para Burela".
En esencia, tras la resolución de la Xunta del pasado viernes, que aprueba la petición de echar el anzuelo en un tramo corto de espigón construido recientemente cerca de Absa, los cañistas demandan que se les "deixe pescar na zona verde, onde está a madeira, cando non traballen nin se carguen barcos".
