Los vecinos cuidan de la calle

Los habitantes de un barrio de Ribadeo ajardinan la zona plantando flores por su cuenta. Elaboraron unos carteles con pizarra y piden que no se destruya lo que fueron logrando
Una de las vecinas que más se implicó en la iniciativa coloca uno de los carteles en Alfredo Deaño. JOSÉ Mª ÁLVEZ
photo_camera Una de las vecinas que más se implicó en la iniciativa coloca uno de los carteles en Alfredo Deaño. JOSÉ Mª ÁLVEZ

Los vecinos del entorno de la calle Alfredo Deaño de Ribadeo decidieron hace un tiempo que, a través de una asociación pero sobre todo con empeño propio, podían mejorar su entorno, aunque fuese en la parte pública, y se pusieron manos a la obra realizando mejoras en la jardinería, que ahora que llega la primavera luce de forma espectacular en toda la zona.

En esa calle fueron varios los vecinos que se implicaron con el permiso y la complicidad del Concello en una iniciativa que tiene como objetivo tan solo dejar la zona en la que viven lo mejor posible.

Tienen alguna ayuda inestimable, como la de la propietaria de la casa de turismo rural A Cortiña que se encuentra justo en esa zona y es toda una experta en jardinería y se encarga de los aspectos más delicados.

No son pocos y entre ellos está la selección floral, que va desde dos tipos de geranio hasta otras como las varitas de San José, los agapantos u hortensias, entre algunas más.

Precisamente con las hortensias tuvieron un disgusto debido a que varias plantas que ya estaban luciendo su flor alguien las robó arrancando la planta desde su raíz.

No fue el único disgusto que tuvieron porque en otra ocasión también habían plantado algunas flores que también les aparecieron arrancadas después de un fin de semana.

MEJORA. Pero al margen de esos problemas puntuales, consideran que la iniciativa salió perfectamente "e pensamos que agora isto nótase que quedou precioso" tal y como les reconocen muchas de las personas que a diario pasean por allí.

En principio, la idea parece que se va a ir expandiendo. Se planteó en la Asociación de Vecinos de Grañol y Cantalarrana la opción de que esto pudiese hacerse en otras calles del entorno, que tienen una estructura bastante parecida, y en principio fue bien acogida.

Las flores que colocan las completan con unos pequeños carteles con mensajes que principalmente pasan solo por pedir respeto al entorno.

En este caso se encarga de eso María Eugenia Sela, una joven artista de 25 años que trabaja con la pintura y el tatuaje y que se encarga de completar una decoración callejera ejemplar.

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