La Consellería de Infraestruturas e Mobilidade y el Concello de Castro de Rei tienen prevista la mejora y ampliación de 1,2 kilómetros de aceras de la carretera LU-113, que une Rozas con Abadín. El tramo en el que se desarrollarán los trabajos va desde el cementerio de Duarría, en el punto kilómetrico 3,820, hasta la carballeira de Castro de Ribeiras de Lea, a la altura de la caseta del pulpo, en el kilómetro 5,060.
El delegado de la Xunta en Lugo, José Manuel Balseiro; el regidor, Francisco Balado; y técnicos de la Axencia Galega de Infraestruturas, así como el representante de Grupo Bascuas 2008 S.L. –firma encargada de la obra–, visitaron el lugar y avanzaron que comenzarán en la segunda quincena de agosto, con un plazo de ejecución de ocho meses.
Así mismo, los presentes hablaron del proyecto, dotado con 266.500 euros, y detallaron que se renovarán y modernizarán unas aceras que "teñen máis de 35 anos", apuntó Balado. Además, "todos os treitos incluirán un novo pavimento e contará con adaptacións que garantan a accesibilidade para persoas con mobilidade reducida ou de persoas invidentes", explican desde el gobierno autonómico.
A mayores del acondicionamiento de 3.800 metros cuadrados de acera, las obras incluyen la creación de ramplas para garajes y propiedades, el repintado de la señalización horizontal y la renovación de la vertical, y la construcción de un nuevo paso de peatones sobreelevado en frente de la factoría Grupo Sada, con el que se busca garantizar la seguridad vial.
Para Francisco Balado este es un trabajo "moi demandado pola veciñanza", que espera continuar con una segunda fase en el núcleo de Castro hacia los institutos.
