Tras años de espera, interminables gestiones y varias prórrogas, las ansiadas obras que convertirán el histórico edificio de la Casa da Botica en la residencia de mayores de Guitiriz son ya una realidad.
El acta de replanteo del proyecto se rubricó este martes, tras la modificación en el plan de seguridad y salud para adaptarlo a las nuevas condiciones exigidas por la crisis sanitaria del Covid-19, y en la firma estuvieron presentes el presidente de la Diputación de Lugo, José Tomé; la alcaldesa de Guitiriz, Marisol Morandeira; los diputados Pilar García Porto y Pablo Rivera, así como otros representantes municipales y responsables del proyecto, que certificaron la puesta en marcha de forma inmediata de unos trabajos que se ejecutarán de manera paralela.
El primer paso será el de apuntalar la estructura exterior del edificio, que se conservará, y demoler el interior ya que se encuentra muy deteriorado, especialmente la cubierta y la madera, debido a las pésimas condiciones meteorológicas a las que estuvo expuesto. Al mismo tiempo, se construirá una nueva edificación que estará unida a la anterior a través de pasarelas acristaladas.
El proyecto, que supuso un "proceso longo e complexo no que resultou fundamental a estreita colaboración e contacto permanente entre a Deputación e o Concello", tal y como expresó José Tomé, supone una inversión de 1,2 millones de euros por parte del ente provincial y tendrá un plazo de ejecución de doce meses.
Así mismo, Tomé aseguró que el inicio de las obras del centro de atención a las personas mayores son "un momento histórico para Guitiriz" y augura que "mellorará o benestar social" y creará empleo sostenible en la zona.
La residencia de mayores de Guitiriz contará con 52 plazas repartidas en 26 habitaciones
En la misma línea se pronunció la regidora guitiricense, quien agradeció a la Diputación de Lugo su compromiso y se mostró satisfecha con el arranque de unos trabajos que fueron "unha prioridade para o equipo de goberno desde o comezo do mandato".
La residencia de mayores de Guitiriz contará con 52 plazas repartidas en 26 habitaciones que se pueden convertir en dobles. Para acceder a este centro público tendrán preferencia los vecinos del municipio, seguidos por los de los concellos chairegos y, finalmente, el resto de lucenses, de modo que se garantiza que los residentes "sigan vivindo preto dos familiares, amigos e veciños". El precio de la plaza dependerá de la capacidad económica de cada usuario.
Las instalaciones del centro contarán además con una habitación para uso de enfermería dirigida a aquellas personas que requieran atención sanitaria.
En la planta baja de la Casa da Botica se habilitará la cocina, comedor, dirección, aseos y sala de reuniones, mientras que en la parte nueva estarán la recepción, cinco dormitorios y vestuario y aseos del personal.
En la primera planta del viejo edificio se ubicará una sala multiusos, de fisioterapia, gimnasio, despacho médico, la habitación de enfermería y dos aseos para uso general, y en la parte nueva habrá seis habitaciones, sala de estar y un local para baño geriátrico.
La segunda planta estará destinada a los 15 dormitorios restantes y un pequeño local para almacén y útiles de limpieza.
