«Todo empezó cuando estudiaba joyería en la Escuela de Artes y Oficios de Santiago». Así comienza la relación de Lois Pazos con uno de sus amigos inseparables, el cuero.
Mientras realizaba sus estudios de joyería en Santiago, conoció a varios compañeros que trabajaban en el mundo del cuero y fue cuando la este artesano le comenzó a picar algo la curiosidad sobre el trabajo de este material. Tanto es así, que ahora mismo cuenta con un taller propio en As Pontes, donde lleva a cabo todo tipo de piezas en cuero, tanto personalizadas como de inspiración propia.
Lo que comenzó siendo un ‘hobby' para Lois, intenta convertirse en un oficio propio, del cual poder vivir, algo más fácil gracias a la ayuda de su pareja. «Por suerte mi pareja trabaja y así eres más fácil dedicarle todo él tiempo que se necesita», dice.
